Amazon, a pesar de los descensos que viene acumulado, aunque sin fortaleza, dicho sea de paso, es uno de esos valores que sigue siendo apuesta clara en el mercado americano. Básicamente porque a pesar de la incertidumbre, añadida a la temporada de resultados recién estrenada, desde los grupos de inversión se apuesta por la renta variable de EEUU. Y especialmente por los grandes valores como Amazon, al que colocan con buen momento de partida en este 2022.
En uno de sus últimos informes, Goldman Sachs destaca que a pesar de que sus valoraciones son históricamente altas y de lo hawkish que se ha vuelto la FED, hay razones para confiar en los avances en Wall Street. Y explican que con la mirada en un S&P500 que concentra a las acciones de elevada capitalización, Amazon, junto con Meta, Apple, Netflix, Tesla, Google y Nvidia, representan el 27% del mercado.
Sin embargo, en estos primeros compases del año vemos como apenas hay variaciones en las últimas 5 sesiones cotizadas con apenas un recorte del 0,26%. Eso sí las caídas superan ya el 4,6% en el caso del último mes, mientras que son muy similares, sin llegar al 5% negativo en el trimestre. En lo que va de año las caídas alcanzan el 2,75%.
Encara por tanto este nuevo ejercicio, con recorrido a la baja de su precio, que ya viene de lejos: en 2021 apenas subió un 2,4% con el peor recorrido de las FAANG y a años luz del 65% que ganó Google o el 51% que avanzó Microsoft. Un desempeño que solo se fue de peor calado en los últimos años en 2014, cuando el valor cedió al cierre del ejercicio un 22%.
El éxito de 2020 fue de tal calibre para la compañía que ya subir un 21%, tal y como crecieron sus ingresos en el segundo trimestre del año, no era una opción, comparado con el doble en su incremento en el mismo trimestre del año anterior, con lo peor de la pandemia.
Desde DA Davidson se indica que, aunque la computación en la nube y la publicidad fueron negocios que mantuvieron sus ingresos en el pasado ejercicio, frente a las caídas de su división minorista. A pesar de ello desde la firma apuesta por comprar el valor en el mercado, con un precio objetivo para Amazon de 3.900 dólares la acción.
Probablemente su precio más razonable, lejos de los máximos interanuales en un 16.5% que el valor marcó el 13 de julio del pasado ejercicio, es lo que está animando en la mejora de las recomendaciones sobre el valor. Según TipRanks, de los 30 analistas que siguen el valor, los 30 apuestan por comprar Amazon, con un precio objetivo medio que alcanza los 4.150,83 dólares, lo que le otorga un recorrido alcista al valor del 28%.
Morgan Stanley, por ejemplo, acaba de elevar el precio objetivo de sus acciones hasta los 4.200 dólares desde los 4.000 anteriores para el valor. Pero sobre todo el gran impulso viene de la mano de Bank of America que considera a Amazon como uno de los grandes valores en este 2022. Su recomendación es claramente de compra con un elevado precio objetivo, de 4.450 dólares lo que le otorga un potencial en el mercado del 30% sobre su cotización actual.
Su analista Justin Post considera que en el presente ejercicio debería revertirse la tendencia que llevó casi al equilibrio a Amazon en el pasado ejercicio, con la desaceleración en las compras del comercio electrónico a medida que se levantaron las restricciones de presencia física y se reactivaron los minoristas tradicionales en la evolución favorable de la pandemia. Esto unido a los problemas en la cadena de suministro y los cuellos de botella laborales para la compañía hicieron el resto.
Para este año espera que esos vientos en contra se corrijan con perspectiva de fuerte crecimiento y expansión de márgenes desde 2023 hasta 2025 después de un ciclo masivo de inversión en infraestructura. Todo ello le convierte en su principal FAANG para 2022. Todo ello acompañado por el liderazgo de AWS, en su negocio de computación en la nube, que se mantendrá, junto con la aceleración del crecimiento de los ingresos debido a la publicidad y su negocio de ventas a terceros.