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Buffet habló de todo, de la llamada
Obamacare, del sistema sanitario estadounidense, de Bank of America, de bolsa y de la FED. En la entrevista se encargó de dejar claro que no le preocupa el tapering, ya que descuenta que tendrá que ocurrir en un momento u otro.

En concreto, según Buffet los programas QE no han funcionado tan bien como a Bernanke le habría gustado, eso sí, piensa que en ningún caso han hecho mucho daño a la economía.

El inversor tampoco mostró ninguna preferencia por los candidatos a presidir la Reserva Federal, y afirmó que no conoce a Janet Yellen. Eso sí, aseguró que si pudiera elegir preferiría que Ben Bernanke se mantuviera en el puesto.

En cuanto a los mercados, Buffet aseguró que ya están bien valorados y apuntó que en estos cinco años han pasado de estar “ridículamente baratos” a “más o menos en precio en estos momentos”.

El presidente de Berkshire Hathaway apuntó “no estamos encontrando gangas, pero tampoco creo que las empresas estén sobrevaloradas tampoco. Estamos teniendo dificultades para encontrar oportunidades de compra”.

En su última carta a los inversores, Warren Buffet aseguraba que uno de los grandes disgustos como presidente de Berkshire Hathaway en 2012 fue no realizar una gran adquisición. En febrero de este ejercicio se hizo con el 50% del holding que controla Heinz. En cualquier caso, en esa carta afirmaba que su socio Charlie y él “se han puesto el traje de camuflaje y que van a cazar elefantes”.

(Ver: Errores y aciertos de Warren Buffet en 2012)