El gobierno del estado de Minnesota ha estado cerrado desde el pasado viernes, después de que el gobernador demócrata, Mark Dayton
, y el poder legislativo, dominado por los republicanos, no llegaran a un acuerdo sobre el presupuesto antes del día uno de julio, fecha límite.

El último plan del gobernador asciende a aproximadamente 1.400 millones de dólares más que la propuesta del Partido Republicano de 34.200 millones de dólares.

La agencia de calificación ha criticado el uso por parte de Minnesota de los llamados ‘one shots’, o ingresos no recurrentes, para cerrar el déficit durante la recesión un patrón que es probable que se repita en el nuevo presupuesto.

Fitch también ha citado “un entorno de presupuestos cada vez más conflictivo” aunque ha dicho que la perspectiva de calificación era estable.

Casi todos los estados tenían el uno de julio como fecha límite para sus presupuestos y, a pesar de los problemas persistentes en los ingresos causados por la recesión, Minnesota es el único estado que ha tenido que cerrar, tal y como informa la CNBC.

Minnesota tiene de permiso a más de 20.000 de los 36.000 trabajadores del estado, ha suspendido la lotería y decenas de proyectos de construcción de carreteras y ha cerrado parques estatales durante la temporada alta.

Las opciones para equilibrar el presupuesto podrían incluso retrasar aún más el pago de 700 millones de dólares para los colegios, según Fitch.

Mientras que el gobernadores podría recomendar una subida de impuestos a las personas con mayores rentas, de acuerdo con la agencia crediticia, la asamblea legislativa se inclina por la venta de deuda, respaldada por el pago de los fabricantes de cigarrillos, para ayudar a cubrir los costes de los cuidados sanitarios de los fumadores enfermos. La rebaja de Fitch afecta a cerca de 5.700 millones de dólares en bonos.