"El terremoto creó una oportunidad de compra para los inversores de capital. Algo fuera de lo normal, un acontecimiento extraordinario como este, realmente crea una oportunidad", sentenció el tercer hombre más rico del planeta. Incluso añadió: "Si yo fuera propietario de acciones japonesas, no las vendería a causa de los acontecimientos de los últimos 10 días".

El terremoto y el tsunami del 11 de marzo, que causó el peor desastre nuclear en 25 años, puede dar lugar a pérdidas de entre 200 billones de dólares y 300 billones, la mayor parte perteneciente a los costes no asegurados. El Nikkei ha disminuido un 12% desde el 10 de marzo.

Este índice es uno de los cuatro, de todo el mundo, que cae desde la aparición de la crisis financiera de 2008, lo que ha obligado a Berkshire a publicar las pérdidas derivadas de las declaraciones de impuestos. Buffett vendió opciones de venta sobre los índices y puede ser requerido para realizar pagos en efectivo cuando los contratos empiecen a madurar en 2018.

Mark Mobius ve en esta catástrofe una oportunidad para los inversores. El presidente ejecutivo del grupo de mercados emergentes Templeton Asset Management, dijo que los inversores pueden beneficiarse del incremento en la compra de materiales de construcción para recobrar la situación de la zona. "La demanda de cemento, acero y materias primas va a crecer por el gasto en infraestructura que se tiene que hacer para reparar lo que ha sido dañado", dijo Mobius en una entrevista para Bloomberg.