Para entender lo que está pasando con esta compañía, sobre todo en su cotización bursátil, tenemos siempre que observar lo que está pasando en su sector. Esto nos va a dar una pista de por qué un valor está teniendo un comportamiento positivo o negativo en comparación con el resto de su sector.

Aquí estamos viendo el comportamiento de Netflix. Como podemos observar lo cierto es que la estructura que tenía desde el 9 de junio de este año era bastante positiva. Claro está que con las caídas que estamos viendo en el mercado mundial, la estructura está siendo dañada en este sector.

El único problema que tenía este sector era el siguiente. Fíjense como esta subida que sufre a lo largo del 2013 se ve que el comportamiento de la industria es positivo. Está dentro de una estructura de pauta impulsiva, con lo cual se va a comportar mucho mejor que el mercado. Lo que ocurre es que a principios de año ya empezamos a ver cierta debilidad en la intensidad de entrada de dinero. Eso quiere decir que el dinero deja de entrar en el sector.

Eso provoca que tarde o temprano esto vaya afectar a todas las compañías que conformen el sector. De hecho, en 2014 el sector arranca con unas caídas durante los tres primeros meses de en torno al 12%. Después retoma y marca nuevo máximos históricos, pero lo que ocurre es que no coincide con ninguna entrada de dinero. Cuando realmente va a reaccionar al alza es cuando se muestra fortaleza.

De ahí ya tenemos el principal motivo por el cual la compañía americana sufrió caídas en el mercado. Además, estos descensos se vieron agravados por la presentación de resultados, en los que la cuota de nuevos suscriptores estuvo por debajo de las previsiones de comienzos de año.