La semana pasada asistimos a un proceso correctivo que afectó negativamente al conjunto de bancos españoles. Así pues, compañías como Caixabank, Sabadell, Popular o Bankinter, fueron algunas de las más castigadas del Ibex 35.
Entiendo que este duro castigo se debió más a un ajuste de la subida previa que a otra cosa. El sector financiero sigue siendo el más fuerte del mercado. Es lógico que en el desarrollo natural de un mercado alcista, veamos correcciones.
Es cierto que la semana pasada asistimos a rumores, por los que algún banco de inversión dudaba de la recuperación del sistema financiero español.
Cabe destacar que los esfuerzos del ejecutivo español se han centrado en recuperar el sistema financiero. Si bien es cierto que todavía quedan dudas, como por ejemplo la privatización de Catalunya Caixa o la venta de Bankia, queda claro que la banca rota del sistema de cajas de ahorro ha sido superada.
La especulación ha permitido que el Estado español tome conciencia de la gravedad del problema. Gracias a las presiones del mercado, hemos visto de qué manera se ha acelerado la reforma del sistema financiero español. Al fin y al cabo, el mercado no es ningún demonio, sino un simple mensajero. No podemos tratar de buscar culpables cuando el fallo viene de atrás.
Los mismos especuladores que tumbaron las cotizaciones de los bancos, han tenido que cerrar sus posiciones cortas, llevando dichas cotizaciones hacia niveles más reales.
Desde Blackbird, seguimos confiando en el sector financiero. BBVA y Santander han visto frenarse sus cotizaciones por la enorme volatilidad de las divisas emergentes. En concreto BBVA ha desacelerado su tendencia y se encuentra ahora en la segunda línea de aceleración. Técnicamente, mientras no pierda los 8,50 euros, deberíamos aprovechar cualquier corrección para tomar posiciones alcistas. La superación de los 9,15 euros marcaría la reactivación de la tendencia y un nuevo comienzo de aceleración tendencial, que deberíamos tratar de aprovechar.