A Netflix le sigue sonriendo la suerte en las últimas fechas. Eso es lo que muestran sus últimos resultados empresariales, con un beneficio de 57 millones de dólares cuando, dos años atrás, habían registrado pérdidas por valor de 5 millones de dólares. La gestión llevada a cabo recientemente ha catapultado a la compañía y los expertos consideran que de cara al 2014 estos números se incrementarán.
Otro indicativo que señala esta mejora también se ha producido en el mercado de valores.
Las acciones de Netflix en Wall Street han llegado casi a triplicarse desde septiembre de 2012. Un hecho del que, por ejemplo, se ha llegado a aprovechar uno de los grandes inversores estadounidenses como Carl Icahn, cuya inversión inicial ha doblado hasta día de hoy.
En este sentido, los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión sitúan a Netflix en una fase alcista, mientras que otorgan una puntuación de 8,5 en una escala que parte del 0 al 10.
A largo plazo la curva de la compañía de entretenimiento es alcista a largo plazo y a medio plazo, según señalan estos indicadores. Sin embargo, este análisis técnico muestra que el volumen y la volatilidad a largo plazo es decreciente.

