La compañía estadounidense no sólo está luchando contra la competencia, sino que lo tiene que hacer con un sector que está tocado por la caída de los ingresos. Las previsiones del consenso de analistas tampoco es que sean demasiado esperanzadoras para las próximas fechas, aunque desde IBM aseguran que en los próximos trimestres mejorarán sus ganancias.

En su intento por ampliar su volumen de negocio y reinventarse, IBM lanzó ayer el sistema NextScale para mejorar los servicios de cloud computing. 

El incremento de la demanda de los centros de datos ha hecho que la empresa estadounidense haya focalizado su trabajo en este área.
 Es por ello por lo que esperan que este lanzamiento puedan utilizarlo como un repunte para su negocio.

Ayer, además, vendieron su unidad de atención al cliente a Synnex por 505 millones de dólares. Sus acciones reaccionaron con subidas de más del 2%.  Hoy siguen contizando en torno a los 190 dólares. En este entorno, la cotización de IBM ha descendido más de 11% desde máximos anuales. 

En este contexto, IBM se encuentra inmersa en una tendencia bajista según señalan los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión recibiendo una puntuación de 1 punto en una escala que va del 0 al 10. 

El aspecto técnico de la firma estadounidense no es muy positivo, según estos indicadores que sólo muestran que la volatilidad a corto y medio plazo es decreciente.