American Express se está aprovechando de que el pago con tarjeta se está incrementando en todo el mundo y, más en concreto, en los países emergentes como Brasil, Chile, Argentina o México.
Tanto es así, que en sus resultados del segundo trimestre su beneficio se incrementó con respecto al mismo periodo del año anterior un 5%.


De hecho, el aumento de sus ingresos en un 4% y la previsión para todos los expertos de que el tercer trimestre obtenga unos resultados mejores, hace que la compañía estadounidense se encuentre en una posición consolidada en los mercados.

Su cotización en bolsa se ha disparado casi un 30% en el último año, debido a la estabilización del sector bancario en Estados Unidos y al incremento del uso de las tarjetas, tanto en comercios habituales, como en el comercio electrónico.

En este sentido, los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión señalan que American Express se encuentra en fase alcista con una puntuación de 9 en una escala del 0 al 10.

Estos indicadores muestran que la tendencia a corto plazo y a largo plazo es alcista y la volatilidad es decreciente. El único punto negativo que indican es que el volumen a largo plazo es decreciente.