
A tres semanas de que acabe 2025, Iberdrola acumula una revalorización de un 37% que ha disparado su capitalización bursátil por encima de los 118.000 millones de euros. Y aunque la mayoría de casas de análisis ya no ven mucho más recorrido alcista llegados a este punto, lo cierto es que hay algunos que sí esperan más subidas.
Es el caso de HSBC, que ha decidido hoy mantener su recomendación de ‘compra’ para Iberdrola, al tiempo que ha elevado el precio objetivo de la acción de 19 a 19,90 euros. Esta valoración supone un potencial alcista de un 11,70% frente al cierre de ayer miércoles.
Algo menos optimistas son los analistas de Jefferies, que bajan la recomendación de Iberdrola de ‘comprar’ a ‘mantener’, si bien elevan el precio objetivo de 17,6 a 19,2 euros por acción. En este caso, el potencial alcista es de un 7,77% frente al cierre del miércoles.
Hay que tener en cuenta que el consenso de analistas da una recomendación de ‘mantener’ para Iberdrola, según los datos recopilados por Reuters. El precio objetivo medio, de 17,83 euros por acción, supone un potencial alcista de un 1,02% frente a la cotización actual.

Hoy las acciones de Iberdrola no logran escapar de las dudas que dominan en el mercado, con un descenso de un 0,87% a media mañana hasta marcar 17,66 euros. Los títulos se encuentran un 3,4% por debajo de los máximos históricos de 18,28 euros que llegaron a tocar en la sesión del 27 de noviembre.
La subida en lo que va de año es de un 37%, mientras que respecto a los mínimos de las últimas 52 semanas, situados en los 12,332 euros desde el 19 de diciembre del año pasado, es ya de un 43,20%.
Iberdrola se anotó un beneficio neto de 5.307 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone un 3% menos respecto a los 5.471 millones del año pasado. Pero excluyendo extraordinarios, el beneficio neto fue de 5.307 millones de euros, lo que supone un aumento de casi el 17%.

