Cierre mixto de los indicadores de Wall Street con los valores de corte defensivo, como utilities, telecos e inmobiliarias patrimonialistas quedando atrás. Todo parece indicar que el reciente anuncio por parte de las autoridades estadounidenses sobre la implantación de nuevas tarifas a 200.000 millones de dólares de importaciones chinas y la réplica de China, imponiendo nuevas tarifas a 60.000 millones de importaciones estadounidenses, estaba ya descontado por los mercados. Es más, dicen los expertos de Link Securities, “el hecho de que ambos gobiernos hayan optado por tarifas que van desde el 5-10% y que hayan excluido algunos sectores estratégicos, ha sido un alivio para unos inversores que siguen viendo el conflicto comercial entre ambos países como uno de los principales factores de riesgo a los que se tienen que enfrentar los mercados financieros a corto y medio plazo”.
A partir de enero, si ambas naciones no llegan a un acuerdo, es más que probable que las nuevas tarifas se revisen al alza, hasta el 25%. “Este sería un escenario muy negativo para los mercados de valores mundiales” y que, según varias casas de análisis, terminaría por lastrar el crecimiento de ambas economías y de la economía global.
En medio de los reproches entre uno y otro país, el Banco Central de China afirmó ayer que se mantendrán prudentes y neutrales en la política monetaria y añadió que mantendrán la liquidez en rangos razonables. Su antecesor en el cargo, Zhou Xiaochuan, afirmó que el país necesita cambiar su mentalidad en lo que respecta a las subvenciones.
Aquí en Europa, el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, ha anunciado que los presupuestos 2019 incluirán una renta básica ciudadana. El presidente del BCE ha apostado por “un fondo anticrisis considerable” para la zona euro mientras que el Banco de Inglaterra, ha afirmado haber mandado una carta a los bancos británicos y aseguradoras buscando explicar a ejecutivos y juntas de dirección que, de cara a los riesgos asociados con la transición de los tipos de interés de los préstamos, deudas y derivados, se están tomando las medidas adecuadas en este momento.
Con todo, hoy la atención estará puesta sobre los valores relacionados con las materias primas minerales y con los energéticos, celebrando estos últimos la renovada fortaleza del precio del crudo.
Dentro del Eurostoxx 50, Bayer sube más de un 0.9% y se instala sobre los 74.77 euros. SG supera el punto porcentual de revalorización – hasta los 37.52 euros – mientras que las acciones de ING y BNP escalan por encima del medio punto porcentual, hasta los 11.33 y los 53.28 euros, respectivamente.
En el lado de los números rojos, Schneider Electric se deja algo más de cuatro décimas en la apertura, hasta los 68.86 euros; Philips cede un 0,4% y cotiza en los 38.82 euros mientras que las acciones de SAP y Deutsche Telekom se dejan algo más de dos décimas y cotizan en los 101.85 euros y los 13.70 euros, respectivamente.
En el ámbito corporativo, IG Group ha anunciado unas ventas de 128.9 millones de libras, han anunciado que el número de clientes británicos ha retrocedido un 13% respecto al primer trimestre fiscal de 2017, y su filial alemana ha conseguido la autorización de la BaFin para ofrecer servicios financieros a lso clientes de Unión Europea.
Danske Bank ha visto cómo su director ejecutivo ha solicitado la dimisión por un escándalo millonario de blanqueo de dinero de clientes de otros países en su filial de Estonia.
Salzgitter subió ayer estimaciones anuales, lo que le hizo subir más de un 5% en el mercado. La compañía espera un beneficio antes de impuestos de entre 300-350 millones de euros y un ROCE del 9 al 11%.
En el mercado se está hablando del interés de Telecom Italia en Nextel Telecomunicacoes en Brasil y de que Nestlé estaría estudiando opciones estratégicas para su unidad de skin health. Esperan tener detalles para mediados de 2019. Una revisión que se enmarca, dice la compañía, dentro de una revisión estratégica regular.
Bayer ha solicitado a un juzgado de EEUU que anule una sentencia de 289 millones de euros contra Monsanto por falta de pruebas.