La clave estará el próximo mes de junio en Grecia, con la posibilidad de que abandone la zona del euro, hay una reunión convocada en Roma y además tenemos el comité abierto de la Reserva Federal. Todo este contenido político está haciendo que la volatilidad esté en máximos y lidiando por un lado con decepciones y por otro, expectativas que podrían generar un rebote más importante.

Este rumbo errático de las bolsas “no es muy aprovechable, están demandando una inyección de lquidez que puede ir de la mano del BCE –veremos si en la reunión de junio en forma de un nuevo LTRO, compra de bonos o bajada de tipos – o la FED, que puede hacer una nueva operación twist o una operación de estímulo cuantitativo esterilizada”.

Las tres variables que monitonizarán las bolsas serán “el sector financiero, el euro y la prima de riesgo. Depende de las noticias que obtengamos en estas cumbres, así evolucionarán”. El dólar tiene bastante fuerza, con el franco suizo o la corona danesa y fijarnos en las divisa a través de CFDS puede ser una opción interesantes teniendo en cuenta la falta de rumbo que tienen las bolsas.