• Los inversores que ahorran de forma regular se benefician de la “inversión a precio promedio”, según Fidelity InternationalA menos que uno sea excepcionalmente afortunado, resulta prácticamente imposible saber cuál será el punto exacto de inflexión del mercado y si está comprando barato o caro. Y es que, a pesar de que cuando los mercados experimentan volatilidad resulta tentador vender activos o aplazar inversiones, esta conducta conlleva el riesgo de que uno se pierda las fuertes subidas que suelen caracterizar los primeros días de un repunte. Un análisis del rendimiento de los mercados de renta variable de Europa durante los últimos 15 años* reveló que perderse unos cuantos días de subidas tiene un efecto importante sobre la rentabilidad total de las inversiones. Los inversores que se perdieron los mejores 40 días de este periodo experimentaron unas ganancias muy reducidas e incluso fuertes pérdidas en algunos países.Aunque algunas personas prefieren invertir de un solo golpe cuando disponen del dinero, también se puede invertir un importe relativamente pequeño —como por ejemplo 100 € al mes— para cubrirse del riesgo de perderse las mejores subidas. La estrategia conocida como “inversión a precio promedio” puede suavizar el impacto de los bajones bursátiles a la hora de invertir. Esto ocurre porque cuando los precios suben las participaciones que ya posee en el mercado se aprecian y si los precios bajan, su próxima aportación periódica le permitirá comprar un mayor número de participaciones. La tabla adjunta compara las rentabilidades alcanzadas por una persona que invierte un importe único y por otra que divide la misma inversión en aportaciones pequeñas y regulares a lo largo de 6 meses. Al final del periodo, la persona que ahorra regularmente posee una inversión superior a la del inversor que invirtió de un solo golpe.