Vuestras cifras del primer trimestre batieron las previsiones, ¿cómo esperáis cerrar el primer semestre? ¿Y el conjunto del año?

Dentro de este 2017 nuestra idea es, en cierta medida, seguir batiendo las expectativas en ventas, pero sobre todo ir viendo como rentabilizar cada vez mejor nuestras operaciones.

En este sentido, a mí me deja más tranquilo el haber batido las previsiones de Ebitda en el primer trimestre, alcanzando por primera vez una lectura positiva, aunque pensábamos que iba a ser negativo. Y lo hemos hecho a través de una mayor eficiencia de la empresa. Creemos, de hecho, que en este ejercicio estaremos en ventas algo superiores a las expectativas y en Ebitda mejores de lo que habíamos previsto.

3.591 clientes a cierre de marzo, ¿cuáles son vuestros objetivos en este sentido para el corto/medio plazo?

Si bien es importante disponer de una cartera cada vez mayor, lo que queremos más que el número, es que sean de calidad y de alto valor añadido.

Así, en lo que es nuestro producto básico, llamado Virtual Private Server, que es de menor valor no tenemos objetivo en número de clientes, sino más bien de mejorar el ingreso medio por cliente. Ahí están casi 3.000 clientes de nuestra base.

En Cloud DataCenter, el producto de mayor valor añadido, nuestros objetivos son crecer entre unos 100-150 clientes este año y estamos en línea para conseguirlo.

¿Qué novedades o hitos nos podéis avanzar de cara al futuro de vuestro negocio?

Sobre todo consolidar la posición en Latinoamérica. Este año estamos obligados ya a consolidar nuestra presencia en México, que ha sido el último país al que nos hemos incorporado. Y mejorar las operaciones tanto en Colombia, como en Chile y Perú, que es donde llevamos más tiempo, y ahí es donde vamos a centrarnos.

Otro hito importante a cubrir este año es a ver si podemos hacer nuestra primera operación de compra de alguna otra empresa, porque creemos que en Gigas tenemos que crecer tanto de forma orgánica, como inorgánica.

Vea también: Esta semana pondrá a prueba a los mercados

Estáis presentes en España, Estados Unidos, Colombia, Chile, Perú, Panamá y México, ¿qué otros mercados tenéis en el radar?

Ahora mismo, en términos de presencia geográfica a través de oficinas comerciales hemos cubierto nuestro objetivo de estar en los principales países de habla hispana en Latinoamérica.

Y, en cuanto a estrategia internacional, lo que haríamos, y estamos invirtiendo en ello si bien no podemos dar resultados, es en el tema de marca blanca. Establecernos como un proveedor que da su tecnología a empresas que quieren operar en cloud y que no tienen tecnología propia, vendiendo con su propia marca y nosotros por detrás, y eso lo podemos hacer en países que no son de habla hispana. Estamos en conversaciones en varios países y esperemos cerrar alguna operación de este tipo.

¿Cómo valoráis el efecto Trump sobre vuestro negocio mexicano?

Nosotros en México hemos comenzado este año, con lo cual somos muy optimistas en cuanto al desarrollo del negocio en general, sin tener nada que ver con Trump. Su efecto, quizá se pueda manifestar, en cierta medida, a través de un mayor cariño que puedan tener los clientes mexicanos a contratar con empresas no norteamericanas. Y, en ese sentido, nosotros al ser una compañía española podríamos tener algún tipo de beneficio. Es sería un poco el efecto colateral positivo que nos podría afectar.  

¿Os planteáis llevar a cabo alguna compra? ¿Qué tiene que tener una compañía para despertar vuestro interés?

Estamos buscando compras de tamaño pequeño, que no superen el millón o millón y medio de ventas; que tengan una buena cartera de clientes;  que hayan quedado algo retrasadas en la adaptación de tecnologías cloud, y que a nosotros nos permitan crecer número de clientes a través de la incorporación de los suyos y, al mismo tiempo, poder venderles otros servicios.

Y que sean firmas, de alguna forma, que tengan relación muy estrecha con esos clientes, que tengan bien ‘cautivizados’ a esos clientes, pero al mismo tiempo nos permitan a nosotros venderles más productos.

Vea también: La ruptura de los mínimos de mayo nos deja en fase de consolidación

Echando un vistazo al sector tecnológico español en general, ¿cuál es su salud? ¿Qué deberes tiene pendientes?

Yo creo que el sector tecnológico español está creciendo a ratios interesantes en todos los aspectos.

En la parte que más nos toca a nosotros, la de adopción de tecnologías cloud, que están siendo muy disruptivas en el mercado, nos gustaría ver mayor apoyo por parte de los estamentos públicos a la adopción de estas tecnologías, porque creemos que es donde está el futuro.

Y creemos también que debería favorecerse más a las empresas de carácter nacional. Estamos un poco preocupados de ver siempre que fomenta mucho a los operadores internacionales, que no desarrollan una gran inversión en España, que no mantienen centros de datos en el país. Deberían fomentarse compañías nacionales, lo estamos haciendo bien, con tamaños como el nuestro, pequeño, deberíamos tener algo más de apoyo.

Tomemos ahora el pulso a las empresas de pequeña y mediana capitalización, ¿cuáles son sus retos?

Pasar a ser empresas de gran capitalización. Tenemos que crecer. Tenemos que ser serios. Tenemos que operar en niveles de lo que llaman gobernanza corporativa al mejor nivel. Dar una imagen real de transparencia y de conocimiento de lo que estamos haciendo a nuestros inversores, que estos se sientan cómodos con la forma de hacer las cosas.

Intentar crecer, porque, al final, el gran problema de una empresa de pequeña y mediana capitalización es la liquidez, y la única forma de dar liquidez a este valor es hacerlo crecer en términos de tamaño y en eso tenemos que estar todos. 

Vea también: El sector tecnológico y teleco español a la vanguardia