José Carlos Díez, economista jefe de Intermoney, asegura que lo peor de la recesión en España ha pasado, algo que no quiere decir que la crisis no vaya a seguir. “Todavía nos quedan bastantes meses de recesión en los que la economía va a seguir destruyendo empleo”
. Sin embargo, insiste en que “estamos viendo indicadores, sobre todo en EE.UU. y China pero también en la economía española que dan una señal de que empezamos a ver una luz al final del túnel y que esa luz ya no es un tren que nos va a volver a arrollar”. En este sentido, destaca que cuando salgamos del túnel nos encontraremos con una economía muy diferente a la que teníamos antes del verano de 2007 y todavía en fase de reconstrucción”. De este modo, hace un llamamiento a la prudencia porque tiene claro que nos quedan todavía cosas negativas por ver.

Para Díez, China incluso ya está dando señales de reactivación de la economía y de entrar en un nuevo ciclo expansivo. A su juicio, este país cuenta con una ventaja de que tiene el crédito dirigido por el gobierno. A su juicio, este país cuenta con una ventaja de que tiene el crédito dirigido por el gobierno y éste ha pasado en los últimos meses de crecimientos del 10 por ciento a crecimientos del 18-20 por ciento.. También ve señales positivas dentro del sector industrial y de la inversión (…). Para el economista jefe de Intermoney, una de las razones por las que empiezan a ver más luz está en que “la actuación de la política económica ha sido desproporcionada” ante una crisis que es histórica. Es decir, recuerda que “nunca habíamos visto a tantos países y a tantos bancos centrales actuando con tanta contundencia a la vez”, algo que está empezando a tener efecto, aunque “no quita que el enfermo siga débil y que haya que seguir tomando medidas”.

Respecto a EE.UU., señala que las señales no son tan claras como en China, pero destaca que “las ventas minoristas y el consumo ya se han dado la vuelta”. En el primer trimestre el consumo privado será negativo otra vez, pero con menos intensidad que en el trimestre anterior (…), asegura. Lo malo, según Díez, es que “ahora viene la crisis industrial que va a ser muy dura porque llega con retraso, la producción industrial cae con fuerza y la economía sigue destruyendo empleo con mucha intensidad”. Por todo ello, cree que hasta después del verano la economía estadounidense no estabilizará su destrucción de empleo y no saldrá de la recesión”. En todo caso, en este escenario “lo que tienen que ver las empresas es que sus ventas dejan de caer y eso lo estamos viendo ya”. “Las ventas ya son un ancla que evitan el escenario deflacionista y depresivo en EE.UU.”, concluye

José Carlos Díez señala que “salvo errores como el de Lehman Brothers (…) si se sigue apuntalando el sector financiero en EE.UU pensamos que hemos visto los mínimos en las bolsas o están muy cerca”. Respecto a un posible escenario de deflación en España, recuerda que “una cosa es que los precios caigan y otra es que haya deflación”. Cree que las deflaciones o inflaciones son peligrosas cuando son persistentes en el tiempo, por ello opina que “que veamos unos meses de caídas en un año en el que el petróleo ha distorsionado tanto es normal” (…). Para “ver deflaciones tenemos que centrarnos n la inflación subyacente y, sobre todo, en el componente más estructural de precios que son los servicios”. En definitiva, el riesgo de deflación existe pero la probabilidad es escasa.
 
José Carlos Díez, economista jefe de Intermoney, asegura que Alemania pese a que ha hecho una reestructuración de su sector industrial brutal y posiblemente sea la economía más competitiva del planeta, el país tiene una gran debilidad: un modelo de crecimiento muy desequilibrado. “Dependía demasiado de las exportaciones y su consumo doméstico estaba deprimido, llevan ocho años con el consumo estancado (…), de modo que este desequilibrio ahora les va a pasar facture”, destaca. A Alemania le fue muy bien en la primera parte de la crisis pero ahora viene una segunda que el afecta más: una crisis de comercio internacional y una crisis industrial. Díez señala que “el comercio mundial este año puede caer un 15 o 20 por ciento y el peso de las exportaciones alemanas es un 50 por ciento del PIB”, de modo que acusará una gran crisis. Algo que a España no le viene bien porque es un gran socio industrial de nuestro país. 

Para el economista jefe de Intermoney considera que la actuación del BCE ha sido muy negativa en esta crisis. Sus diagnósticos han ido siempre por detrás y las pocas decisiones que ha tomado han sido muy negativas y muy inoportunas, como subir tipos en julio de 2008 cuando la economía de la Zona Euro ya estaba en recesión. En todo caso, destaca que el máximo organismo monetario de la UE ha rectificado y señala que ahora “los tipos están a un nivel suficientemente bajo como para reactivar la economía y que el problema es de cantidad de dinero en circulación” y el hecho de que “el dinero no está pasando la trampa de la liquidez bancaria”. En este punto, José Carlos Díez recomienda al BCE ir por otras vías como comprar titulizaciones a fondos de inversión o a fondos de pensiones.

José Carlos Díez se cree las cuentas que están publicando bancos ayudados por el gobierno de EE.UU como Citigroup, Goldman Sach, etc….pero destaca que “lo que estamos viendo en los balances es que los bancos están dando muchos beneficios atípicos o extraordinarios por trading, por operativa de compraventa". Lo importante para este experto es que la banca vuelva a dar beneficio por su operativa de banca comercial.