Tras la reunión de la semana pasada del Banco Central Europeo quedó claro que al menos hasta el primer trimestre de 2020, no habrá incremento en los tipos de interés. Y tras esa rueda de prensa, muchas firmas de inversión barajan, incluso, rebajas de tipos y nuevas medidas acomodaticias. Pero y ¿que pensará el que será el sucesor de Mario Dragui en octubre; contará con otras municiones?
Ante este entorno de tipos de interés bajos por más tiempo, las alternativas de inversión con pago periódico de rentas sigue siendo una opción atractiva de inversión.
Parte de esta búsqueda explica la inversión en bienes raíces puestos en alquiler posteriormente y “garantizarse” ese pago adicional. Así surgen productos que cubran esa necesidad de completar el ingreso recurrente (como eran los depósitos a plazo) que ofrezca una renta periódica. Con ello se explica, en parte, la existencia de los fondos income, vehículos que se distinguen por buscar ofrecer una renta periódica atractiva, independientemente de la estrategia subyacente.
Pero no es sólo una necesidad del inversor español, sino de inversores/ahorradores de países como Japón o bien Alemania, lo que explicó hace algunos años el surgimiento de tantos fondos dividendo.
Cabe aclarar que esa “renta” adicional no está garantizada, ya que depende de los activos subyacentes que integran la cartera y por tanto, el riesgo asumido. Si bien, con renta fija el riesgo puede ser algo menor (como la deuda senior de un banco), para conseguir mayores rentabilidades habrá que invertir en a bonos high yield, renta variable o mixtos. Con esto en mente y siendo consiente el ahorrador de los riesgos que conlleva esta inversión, estos fondos pueden ser una alternativa de inversión.
Frente a los dividendos anuales pagados por algunas empresas, un fondo income tiene la ventaja de tener frecuencias diferentes, ya que los hay con reparto semestral, mensual, trimestralmente o anual. Además, dicho pago se ha igualado fiscalmente a la regulación del dividendo de las acciones. Los fondos income también tienen el foco en el crecimiento de capital.
Hay fondos income de renta fija, renta variable y mixtos, y habrá que buscar aquellos se aporten mayor flexibilidad y por tanto, menos correlación con otros activos y que sirvan, en cierta forma, de refugio.
Y es por ello que tocaremos hoy los fondos mixtos, donde el gestor sea capaz de aprovechar las oportunidades en todo el universo de instrumentos y que no sólo maximice el cupón a repartir, sino que den ingresos de calidad.
Hemos seleccionado estos tres fondos mixtos moderados con distribución de dividendo. Uno de Jupiter (Jupiter Merlin International Balanced Portfolio); uno de Oddo BHF AM (ODDO BHF Polaris Balanced DN-EUR) y otro de Allianz GI (Allianz Income and Growth AT H2-EUR), con pago de rentas anuales en el caso de los dos primeros. Sin embargo, el de Allianz GI hace una distribución mensual de $0,066 (objetivo muy ambicioso), lo que resulta en asumir algo más de riesgo, invirtiendo en una combinación de renta variable, HY y bonos convertibles, prácticamente equitativamente.
El de Oddo BHF AM tiene más sesgo a Europa, mientras que el de Allianz GI está altamente (97%) orientado a Estados Unidos y el de Jupiter prácticamente más equilibrado (32% Europa, 46% EE.UU. y 21% Asia). En cuanto a sectores, prácticamente el 21% en los tres casos a sectores defensivos, el de Allianz GI con casi la mitad de la cartera a sector sensible al ciclo:
Son fondos posicionados en primer cuartil tanto en forma anual como a 3 años, con 5 y 4 estrellas Morningstar, encon una antigüedad razonable (excepto el de Oddo BHF AM). Con volatilidades bajas (entre el 5 y 8) y con una rentabilidad media a 3 años superior al 5% y un ratio de Sharpe alto para Jupiter, que también es el que muestra menor beta a tres años.
En entornos de bajas rentabilidades y volatilidad al alza, los activos con capacidad para generar rentas pueden representar una herramienta útil para mejorar la rentabilidad de las carteras. Frecuentemente son considerados fondos menos arriesgados.
