A lo largo de toda la semana el Ibex35 ha tenido una baja entre sus componentes, después de la fusión entre Cintra y Ferrovial, cuyo resultado fue la vuelta del grupo al luminoso con un número de acciones cinco veces superior al que tenía Ferrovial antes de la fusión. Ayer, el Comité Asesor Técnico (CAT) decidió incorporar a Ebro Puleva en el selectivo de la Bolsa española con los treinta y cinco mejores valores. No sorprende esta elección, que se hará efectiva a partir del 4 de enero, ya que tal y como afirmó Javier Barrio, responsable de ventas institucionales de BPI, “es una compañía que debería estar en el Ibex desde hace tiempo por su consistencia, solidez y dimensiones. Además ofrece grandes oportunidades de cara al próximo año”.

No era Ebro Puleva la única candidata pero sí la favorita y, en ningún momento, su entrada al Ibex35 se ha visto amenazada por nombres como Zardoya Otis, compañía que Natalia Aguirre,
analista de Renta 4, señaló como segunda candidata y “cuyo volumen negociado (una de las variables que vigila el CAT) es un 50% inferior al de Ebro Puleva”. Para Elena Martín, gestora de inversiones de Unicorp Patrimonio, “la gran competidora era Antena3, sin embargo se ha visto penalizada por el hecho de que el sector audiovisual ya tenga, en Telecinco, un miembro entre los treinta y cinco valores del Ibex”. Otros de los valores que aparecieron en las apuestas fueron Jazztel y Zeltia, ambos descartados al no salir bien parados con la comparación, en lo que a liquidez y capitalización se refiere, con Ebro Puleva.

Estar o no estar en el Ibex35, esa es la cuestión

¿Pregunta sin fundamento ésta? Es posible. Probablemente la gran mayoría de compañías que cotizan en bolsa darían el sí a un matrimonio con el Ibex35. Unión cuya “principal ventaja es la mayor visibilidad de la compañía, de cara a los inversores, especialmente internacionales, e instrumentos indexados al índice”, señalan en Self Bank. Sin embargo, también alertan de que esta mayor visibilidad puede convertirse en desventaja “en el momento de pánico general de los mercados, en los que todos los valores del selectivo se penalizan de forma discriminada”.

No asustan las posibles turbulencias a Ebro Puleva, que en los días antes a la decisión del CAT recibía el respaldo de Banesto Bolsa, desde donde elevaron el precio objetivo estimado para sus acciones un 21%, dejándolo en los 18.20 euros, lo que ofrece un potencial de revalorización superior al 30% decisión que acompañaron con una recomendación de `compra´.  La Caixa, Kepler y Alphavalue apoyaron este optimismo al situar su precio objetivo por encima de los 16 euros.

Estas han sido una de las consecuencias de su candidatura, además, la empresa de alimentos subió un 3.3% la semana previa a su elección, hasta los 14.07 euros, el nivel más alto desde septiembre de 2007. Un ascenso notable al que todavía le queda recorrido, concretamente de un 8% hasta alcanzar el precio objetivo medio de consenso establecido de analistas, en 15.2 euros. Y es que, Ebro Puleva, “tiene muchos puntos fuertes y poco débiles. Es una buena oportunidad de inversión de cara a 2010”, asegura César Sánchez Grande, analista de Ahorro Corporación.

Requisitos para entrar en el Ibex: El tamaño no importa


Entre los criterios que se utilizan para que un valor entre a formar parte del parqué madrileño, no se tiene en cuenta el sector económico al cual pertenece, lo que se hace es incorporar a las 35 empresas más líquidas del mercado español, independientemente del sector al que pertenezcan. Tampoco se tiene en cuenta la dimensión de las empresas, lo que verdaderamente importa es la liquidez.

Ahora bien, el Ibex35 tiene puerta de entrada y de salida. Existen periodos de control, entendidos éstos como los intervalos de seis meses completos entre las reuniones ordinarias del Comité de Expertos, los cuales se reúnen para comprobar que se cumplan todos los requisitos. En este tiempo un probable candidato a dejar de formar parte del principal índice de la Bolsa Española es aquel que no pueda superar ciertos filtros: La capitalización media del valor (Ebro Puleva tiene una capitalización de aproximadamente 2.200 millones de euros) a computar en el índice, deberá ser superior al 0.30% de la capitalización media del índice durante el periodo de control y, el valor debe haber contratado al menos 1/3 de las sesiones de dicho periodo.

Aplicando estos requisitos imprescindibles no cabe ninguna duda de que Ebro Puleva era la mejor candidata, y por tanto ha sido la elección más acertada, “ya que las compañías que aparecen por encima en el ranking de volúmenes negociados no cumplirían el criterio de capitalización mínima”, apuntaron desde  Banesto Bolsa.

Así, con la entrada de Ebro Puleva en el selectivo madrileño, el Ibex incorpora al primer grupo alimentario español, además de sumar a su lista a un valor que seguirá creciendo en 2010