Es más, el  36%  de  los   inversores  de ellos explican que son muy conervadores, el porcentaje más alto de todos los países europeos.  Eso sí, de acuerdo con los autores del estudio, los ahorradores de nuestro país son “inversores  conservadores que aspiran a lograr rentabilidades elevadas”.

En concreto, esperan unos retornos del 7,20% anual de sus inversiones. Un porcentaje en el que solo los suecos,que aspiran a rentabilidades del 7,87%. Sin embargo, esta tasa está muy lejos de la realidad, ya que la rentabilidad media no llega ni al 5%.

Javier  Mallo,  responsable  de  Legg  Mason  para  España  y  Portugal,  afirma que : «La  encuesta  Global  Investment  Survey   muestra  que  España  cuenta  con  la  mayor  brecha  de  Europa  en  cuanto  a  la  rentabilidad  que  los  inversores  esperan   de  sus  inversiones  y  lo  que  obtienen  en  realidad.  Mientras  que  la  brecha  de  rentabilidad  en  Europa  se  sitúa  en   alrededor  del  ­1,74%,  en  nuestro  país  alcanza  el  2,32%”.

Todo esto en un país en el que más de un 20% de los ciudadanos no dispone ni de ahorros, ni de inversión. Solo un 28% opta por ambas opciones.

En la firma apuntan que por el momento los españoles prefieren el ahorro a la inversión. “Existe  una  diferencia  sustancial  entre  aquellos  inversores  que  únicamente  disponen  de  ahorros   (el  46%)  frente  a  aquellos  que  solo  tienen  inversiones  (4%)”, explica.

¿Por qué no invierten en fondos de inversión?

Los encuestados consideran que a la hora de aumentar el capital invertido en fondos de inversión les ayudaría un régimen tributario más favorable, así como comisiones más reducidas.

En Legg Mason explican que esto explicaría que “los españoles asignan  la  mayor   parte  de  sus  inversiones  a  activos  líquidos  (28,6%)  y  renta  fija  (15%)”.Curiosamente, a pesar del perfil más conservador, los ahorradores que más porcentaje de sus inversiones destinan a activos menos tradicionales como las materias primas. En concreto, alrededor de un 10% de la cartera.

Animaría a invertir

Pero si hay algo que llama la atención es la poca diversificación geográfica que hacemos de neustros ahorros. Más de la mitad de los inversores, un 54%, dedican todas sus inversiones a activos en España.  “Este  porcentaje  les  convierte,  junto  a  los   franceses,  en  los  inversores  que  menos  diversifican  por  región  (el  55%  de  los  franceses  cuenta  con  el  100%  de  sus   activos  invertidos  en  su  país)”, dicen los autores de la encuesta.

Las razones son varias. Por un lado, la  “incertidumbre  mundial”,  mientras  que  el  16%  considera  que  “no  estar  familiarizado   con  las  oportunidades”  es  el  obstáculo  más  importante.      

Hay que destacar que la huella de la crisis financiera sigue siendo muy profunda. Según Legg Mason, somos los europeos más influenciados por estos años.   Tres  de  cada  cuatro   (74%)   se  muestran   “algo   condicionados”  o  “muy  condicionados”  por  la  crisis,  lo  que  representa  el  porcentaje  más  elevado  de  Europa,  junto  con   Italia.

Señalan que “al  pedirles  que  resumieran  en  un  único  concepto  su  enfoque  de  ahorro  e  inversión  durante  los  tres  últimos  años,  el   39%  eligió  “continuidad”  (“no  haber  realizado  ningún  cambio”)  en  primer  lugar,  mientras  que  uno  de  cada  cuatro   (25%)  optó  por  “ambición”  (“tener  un  fuerte  deseo  de  incrementar  su  patrimonio”). 

crisis financiera

Además, afirman que el ahorro en  en  efectivo  (18%)  y  comprar  un  activo  inmobiliario  (18%)  han  sido  las  dos  decisiones  de  inversión   tomadas  en  los  últimos  10  años  de  las  que  los  inversores  españoles  se  sienten  más  satisfechos.  “De  este  modo  son,   junto  con  los  italianos,  los  que  más  cómodos  se  sienten  manteniendo  sus  ahorros  en  efectivo.  Cabe  destacar  que   haber  adquirido  un  bien  inmobiliario  es  la  decisión  con  la  que  más  satisfechos  se  sienten  todos  los  inversores   europeos  participantes  en  este  estudio”.

Un 59% de los encuestados se muestran optimistas sobre la evolución de sus carteras este año, uno de los porcentajes más altos en toda Europa, junto a británicos y suecos. ” Dicho  optimismo  también  se   manifiesta  en  el  hecho  de  que  un  tercio  (33%,  el  dato  más  alto  de  todos  los  países  europeos)  desee  asumir  un  mayor   riesgo  en  las  inversiones  que  va  a  realizar  en  lo  que  queda  de  año.  Por  su  parte,  el  47%  de  los  inversores  españoles   no  espera  cambiar  el  nivel  de  riesgo  de  su  cartera  de  ahorros  e  inversiones  en  2017”, dicen en Legg Mason.    

Según  Javier  Mallo,  responsable  de  Legg  Mason  para  España  y  Portugal,   “este  dato  constituye  una  de  las   conclusiones  más  significativas  de  la  encuesta  Global  Investment  Survey  de  Legg  Mason:  a  pesar  de  que  los   inversores  españoles  sean  los  más  conservadores  y  los  que  más  aversión  al  riesgo  presentan,  también  son  los  más   proclives  a  asumir  más  riesgo  en  2017  para  aumentar  la  rentabilidad  de  sus  carteras”.    

Y cuando se les preguntan por las mejores oportunidades este año son claros: sector inmobiliario, renta variable internacional y la renta variable nacional serán los activos que mejor lo harán este año.

 En   cuanto  a  los  países  y  regiones  que  representan  las  mejores  oportunidades  de  inversión  para  ellos  en  2017,  el  35%   indicó  a  EE.  UU.  como  la  primera  opción,  seguido  de  Europa  (sin  el  Reino  Unido)  y  China  compartiendo  segundo   lugar  (34%  ambas  regiones)