El grupo industrial alemán Thyssenkrupp registró un beneficio neto de 106 millones de euros en el primer trimestre de su año fiscal, finalizado en diciembre, frente a las pérdidas netas de 145 millones de euros del mismo periodo del ejercicio anterior, según ha informado este jueves la compañía.

"Hemos realizado importantes progresos a la hora de mejorar nuestro rendimiento y centrar el foco de nuestra cartera. Pero todavía no estamos donde queremos estar, lo que explica que no nos rindamos y sigamos trabajando a plena velocidad en implementar nuestro plan", ha indicado el director financiero de Thyssenkrupp, Klaus Keysberg.

Las ventas de la firma germana experimentaron un incremento del 23,2% en el trimestre, hasta alcanzar los 9.023 millones de euros. Por segmentos de negocio, la división de materiales se mantuvo como la principal, con 3.290 millones de euros de ventas, un 38,9% más, mientras que la división europea de acero facturó 2.669 millones, un 39,2% más.

Por otro lado, el segmento de cemento, construcción de plantas químicas y minería se anotó unos ingresos de 1.540 millones, un 28,3% más, al tiempo que el área de automoción los recortó un 9%, hasta 1.106 millones. El segmento de componentes industriales se situó en 604 millones (-2,7%) y el de sistemas marítimos alcanzó los 377 millones de euros (+3,6%).

Entre octubre y diciembre, Thyssenkrupp recibió nuevos pedidos por valor de 10.398 millones de euros, un 33% más que en el mismo periodo del ejercicio fiscal precedente.

El coste de los productos vendidos en el trimestre fue de 7.829 millones, un 21,1% más, mientras que los gastos de venta crecieron un 7,6%, hasta 569 millones, y los generales y administrativos se situaron en 361 millones, un 3,7% más.