La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha destacado este jueves el papel del diálogo social para adoptar medidas de Seguridad y Salud en el Trabajo (SST) que contribuyan a la prevención de accidentes y enfermedades laborales.

La OIT se ha referido en el informe "Fomentar el diálogo social para una cultura de seguridad y salud" al caso concreto de la pandemia, cuando la colaboración entre Gobiernos, sindicatos y empresarios sirvió para "la implementación rápida y eficaz de medidas".

"La colaboración entre los actores del mundo del trabajo ha sido esencial para garantizar que las medidas puestas en marcha fueran aceptables y contaran con el apoyo de los empleadores y los trabajadores, y por lo tanto tuvieran más probabilidades de ser aplicadas eficazmente en la práctica", comenta la OIT en un comunicado.

El director general de la OIT, Guy Ryder, insta a aprovechar "las lecciones aprendidas" durante la pandemia para aplicar el diálogo social "a otros contextos", como la seguridad y la salud en el trabajo.

"Esto ayudaría a reducir el nivel inaceptable de muertes y enfermedades laborales que se producen cada año", ha añadido Ryder con motivo del Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo.

La OIT recuerda que 2,9 millones de trabajadores mueren cada año debido a accidentes y enfermedades profesionales y al menos 402 millones de personas sufren lesiones profesionales no mortales.

Además, las enfermedades profesionales causan el 81% de todas las muertes relacionadas con el trabajo, con la exposición a largas jornadas de trabajo como uno de los principales factores de riesgo, seguido de la exposición a partículas, gases y humos.

Los accidentes del trabajo y las enfermedades profesionales determinan en parte la pérdida del 5,4% del Producto Interior Bruto (PIB) mundial anual, según la OIT.