Los cinco principales bancos españoles --Santander, BBVA, CaixaBank, Bankinter y Sabadell-- aumentaron un 4% su cartera de créditos problemáticos, incluyendo aquellos en vigilancia especial, pero sin incurrir en impagos, y los dudodos, también clasificados como 'stage 2' y 'stage 3'.

Según los informes financieros de los cinco grandes bancos de España, el aumento se debe sobre todo al repunte registrado en los créditos en vigilancia especial, en torno a un 5,5% en 2021, hasta los 156.890 millones de euros.

En cambio, los créditos clasificados como dudosos o 'stage 3' aumentaron un 0,6%, hasta los 69.319 millones de euros.

En total, los préstamos problemáticos alcanzaron un volumen de 226.200 millones de euros, un 4% más que en 2020, cuando estos créditos sumaban 217.613 millones de euros.

Por entidades, los préstamos problemáticos de Santander se incrementaron casi un 3%, hasta los 104.000 millones de euros. Aquellos en vigilancia especial sufrieron un aumento del 2,89%, hasta los 71.000 millones, mientras que el volumen total de dudosos sumó cerca de 33.000 millones de euros, un 3,1% más que en 2020.

En cuanto a BBVA, registró un aumento en su cartera de créditos problemáticos de en torno al 8,4%, hasta cerca de los 54.762 millones de euros. En este caso, se ha descontado el volumen de préstamos en problemas de BBVA USA, vendida a PNC el 1 de junio de 2021.

El grupo bancario aumentó en 2021 especialmente el volumen de créditos en vigilancia especial, en torno a un 12,2%, mientras que los dudosos cayeron un 0,1%.

Por su parte, CaixaBank registró un descenso del 1,41% en 2021 en la suma de préstamos en vigilancia especial y dudosos, hasta los 44.500 millones de euros.

Para la comparación se han tenido en cuenta los datos de Bankia correspondientes al ejercicio 2020, cuando esta entidad sumaba casi 17.000 millones en créditos problemáticos, cantidad que junto a la registrada por CaixaBank de 28.000 millones, ascendía a cerca de 45.000 millones de euros en 2020.

Asimismo, Bankinter registró el pasado ejercicio un aumento del 14,8% en su cartera de créditos problemáticos debido al incremento del 29,8% de los préstamos en vigilancia especial, hasta los 2.109 millones de euros. En cambio, los dudosos solo aumentan un 0,5%, con un volumen de 1.690 millones de euros.

También Banco Sabadell experimentó un aumento en su cartera de problemáticos, un 8,3% en comparación con los datos de 2020, hasta los 19.121 millones de euros, debido al alza tanto en los préstamos en vigilancia especial (un 9,1% más) como en los dudosos (un 6,8%).

PROVISIONES PARA INSOLVENCIAS

En su informe, Santander señala que a cierre de 2021 tenía un fondo para insolvencias de 23.698 millones de euros, un 4% menos en euros constantes que en 2020, que representa una cobertura total de activos deteriorados del 71,3%, 5 puntos básicos menos que en 2020.

En BBVA tenían fondos de cobertura por valor de 11.536 millones de euros, un 8,4% menos que a cierre de 2020. La entidad explica que este descenso de debe a "la gestión realizada del saldo dudoso durante el año unido a un incremento de los fallidos". La tasa de cobertura de la entidad cerró en el 75%.

Los fondos para insolvencias de CaixaBank se situaban a 31 de diciembre de 2021 en 8.625 millones de euros, incluyendo los saldos integrados de Bankia. Si se excluyen estos saldos, los fondos se situarían en 5.006 millones de euros, frente a los 5.755 millones que la entidad con origen catalán registró a cierre de 2020.

De esta forma, la tasa de cobertura era del 63% en 2021 frente al 67% de 2020.

Sabadell tenía un fondo para insolvencias y riesgo país de 2.816 millones de euros, un 9,3% menos que a cierre de 2020, y una tasa de cobertura de activos problemáticos del 53,1%. Sin embargo, este banco considera como "problemáticos" un volumen de 6.203 millones de euros de créditos 'stage 3', o dudosos, y 1.362 millones de euros de activos adjudicados.

Por último, Bankinter sumaba una provisiones de 872,6 millones de euros para cubrir los riesgos de sus créditos problemáticos, un 8% más que en 2020. Cerró el año con una ratio de cobertura del 63,56%.