Las dificultades del empleo para reactivarse en los últimos meses se reflejan en las elevadas cifras que se mantienen, tanto de trabajadores en ERTE (casi 900.000) como de autónomos beneficiarios de la prestación extraordinaria por cese de actividad (casi 362.000); es decir, un total de 1,26 millones a cierre de mes, el 6,7% de los afiliados totales: esto significa que el empleo efectivo apenas supera los 17,5 millones, casi medio millón menos que en oct-20.
El peor febrero, en términos de afiliación, en siete años
La afiliación media anotó en febrero la menor subida en dicho mes desde 2013 (+20.632 personas vs +85.735 en feb-20); de este modo, el total se sitúa en 18,85 millones. Con datos a cierre de mes, se contabiliza la primera subida en cuatro meses, 14.290 afiliados más; y ello a pesar de que los dos últimos días hábiles del mes se perdieron casi 36.000 afiliados.
En términos desestacionalizados se registra el primer retroceso en nueve meses (-30.209 afiliados), de modo que en lo que va de 1T21 el avance es de apenas un 0,4% respecto al trimestre anterior (+1% en el 4T20).
De loscerca de 948.000 empleos que se perdieron entre el 12 de marzo y el cierre de abril, se han recuperado casi 444.600, el 46,9% de todo el empleo destruido; en consecuencia, faltan más de medio millón de afiliados (en concreto, 503.337) para volver a los niveles pre-Covid
Por actividades, dentro del Régimen General, en febrero destacan los aumentos del empleo en agricultura (+3,3%), construcción (+2,7%) y educación (+2%), en contraste con el descenso en comercio (-0,8%) y, sobre todo, en hostelería (-2,6%), que, además, empeora notablemente el registro de hace un año (-25.894 afiliados vs +26.184). Por el contrario, la mejoría más intensa corresponde a la Administración Pública, donde la afiliación aumenta en 11.035 personas (+1%), cuatro veces más que en feb-20.
En términos anuales, la caída de la afiliación total quiebra la senda de amortiguación de los meses anteriores y se acelera cuatro décimas hasta el 2,1%, el mayor retroceso desde oct-20 y que supone algo más de 400.000 afiliados perdidos en el último año. En el Régimen General, contrasta el desplome del empleo en hostelería y actividades artísticas y recreativas (-23,3% y -17,6%, respectivamente) con el tono positivo de Administración Pública (+3,8%) y, sobre todo, actividades sanitarias (+5,3%). Destaca muy negativamente la hostelería, que pierde 289.000 afiliados en el Régimen General en el último año, el 72% del empleo perdido en dicho Régimen.
Por lo que respecta a los ERTEs, la cifra de trabajadores afectados cerró febrero ligeramente por debajo de los 900.000 (899.383): respecto al cierre de enero esto supone un descenso de 28.903 personas. De todos estos trabajadores, 645.744, el 71% del total, están incluidos en algunas de las modalidades que se pusieron en marcha a partir del 1 de octubre del pasado año, que conllevan exoneraciones en las cuotas a la Seguridad Social (RDL 30/2020)
El número de trabajadores en ERTE supone el 6,3% del total de afiliados en el Régimen General, si bien existe una gran concentración sectorial; en concreto, cinco actividades concentran cerca del 60% de las personas protegidas por estos instrumentos y tienen a más del 40% de sus afiliados en ERTE: destacan alojamiento, con el 63% de sus afiliados en esta situación, y agencias de viajes (57%), seguidas por juegos de azar, transporte aéreo y comidas y bebidas, todas ellas con entre el 40% y el 50% de sus trabajadores protegidos.
A nivel regional, sólo Murcia aumenta la afiliación en el último año, un exiguo 0,2%, mientras que, en el extremo opuesto se sitúan Canarias y Baleares, con caídas superiores al 6%. En cuanto al impacto de los ERTEs, Cataluña, Andalucía y Madrid aportan casi la mitad de los afectados (más de 431.000), pero en términos relativos las más dañadas son las de mayor actividad turística; en concreto, Baleares y Canarias, con el 9,3% y el 11,6% de sus afiliados totales afectados.
La ratio afiliados ocupados/pensionista se mantiene, por tercer mes consecutivo, en 2,12, cinco centésimas por debajo del dato de feb-20. El número de pensionistas quiebra la senda alcista que venía anotando y cae por primera vez en cinco meses, en 3.305 personas hasta situarse por debajo de los 8,9 millones, casi 7.000 menos que hace un año. Por su parte, el gasto mensual en pensiones crece un 2,3% interanual hasta 10.100 millones de euros.
Por lo que respecta al número de empresas inscritas en la Seguridad Social, crece en febrero por primera vez en cuatro meses, 3.425 hasta cerca de 1,38 millones, todavía muy lejos de los niveles pre-Covid: desde feb-20 se han perdido 111.291 empresas (-7,5%)
El paro supera los cuatro millones
El paro registrado crece, por cuarto mes consecutivo, en 76.216 personas (+2% mensual), lo que supone, además, el peor dato en un mes de enero en tres años (+90.248 en ene-20); de este modo, el total de parados supera los 3,96 millones, máximo desde abr-16. En cambio, en términos desestacionalizados el registro es bueno: anota el primer descenso en tres meses (-17.544 parados vs +10.710 de media en octubre-diciembre de 2020).
La contratación sigue contrayéndose
En febrero se firmaron 1,21 millones de contratos, un 24% menos que un año antes y el peor registro en dicho mes en siete años. El 10,9% de dichos contratos fueron indefinidos (-25,7% vs -23,8% los temporales), lo que supone el porcentaje más alto en 11 meses.
Por lo que respecta a los beneficiarios de prestaciones por desempleo, en enero crecieron en 77.272, la mayor subida en ocho meses, hasta casi 2,38 millones, un 16,1% más que un año antes. Por su parte, el número de parados sin prestación se reduce ligeramente, algo que no sucedía desde may-20: 1.056 personas menos hasta cerca de 1,59 millones. En cuanto a los gastos totales en prestaciones, superan los 2.629 millones de euros, un 40,8% más que un año antes.
