Los inversores castigan a la alemana después de confirmar que en el tercer trimestre tuvo una pérdida atribuida de 131 millones de euros, frente al beneficio 254 millones de euros un año antes. Redujo la entrada de pedidos en 31.000 millones.

El grupo industrial alemán ThyssenKrupp cae más de un 1,25% en los primeros pasos de cotización después de confesar que ganó 190 millones de euros en los tres primeros trimestres de su año fiscal 2017/2018. La cifra supone un 36% menos que un año antes.

La germana entra en pérdidas en el tercer trimestre. En concreto registró una pérdida atribuida de 131 millones de euros, frente al beneficio 254 millones de euros un año antes, sin incluir los números de la vendida Steel Americas.

En la presentación de resultados, el presidente de ThyssenKrupp, Guido Kerkhoff, ha asegurado que “el resultado neto actual no les satisface”, que el flujo de caja no es satisfactorio y que esta situación no es sostenible a la larga.

Thyssenkrupp subió en los tres primeros trimestres la facturación un 3 % pero redujo la entrada de pedidos un 1 % , o lo que es lo mismo, 31.122 millones de euros.

La germana tiene previsto fusionar sus actividades de acero en Europa con las de la compañía india Tata. Una operación que prevé mejorará las cifras principales del balance de forma significativa.

Aunque para este año  prevé un beneficio neto mejor que el obtenido el año pasado, de 271 millones de euros y un flujo de caja libre antes de fusiones y adquisiciones también mejor, seguirá siendo negativo por la situación en la división de Soluciones Industriales.