Las Líneas ICO se han consolidado como una de las fórmulas de financiación más eficaces para atender la demanda de crédito de las empresas españolas. Estos créditos del gobierno, que se ejecutan a través de bancos y entidades financieras autorizadas que asumen el riesgo, permiten afrontar no sólo los negocios y proyectos de inversión relacionados con su actividad en España, sino también impulsar la internacionalización de las empresas y financiar su actividad exportadora. “El objetivo es cubrir todos los estadios del desarrollo empresarial”, señalan en la web oficial de este organismo, que ofrece un abanico de líneas de crédito con el fin de adaptarse a cada necesidad.
Y en el primer semestre de 2019, Santander ha pisado el acelerador y se sitúa como líder del sistema financiero español en financiación ICO, con una cuota de mercado superior al 50%: ha canalizado una de cada dos operaciones, lo que supone una financiación total de 1.023 millones de euros, más del doble que su siguiente competidor en el ranking. El banco ha formalizado más de 15.500 operaciones, por un importe medio de 70.000 euros y un plazo que, en su mayor parte, es de tres años en adelante. El 70% de estas operaciones se han realizado con el segmento de autónomos y microempresas, y el 30% restante con el de empresas y pymes.
La absorción de Popular por Banco Santander hace un año ha ayudado al grupo resultante a situarse a la vanguardia de la financiación y los servicios a pequeñas empresas, microempresas y autónomos de nuestro país. Integradas ya ambas marcas bajo una sola red comercial -la unión culminó con éxito el pasado mes de julio- la cuota de mercado en este segmento se sitúa en torno al 25%. Pero la apuesta del grupo cántabro viene de atrás. La transformación digital y comercial que el banco está llevando a cabo desde hace años ha permitido al grupo aumentar en los últimos tres años un 66% su base de clientes vinculados en este segmento, que ya asciende a 1,7 millones.
Santander cuenta con soluciones digitales globales que impulsan la conectividad entre empresas, ayudan a la exportación, y ofrece plataformas más innovadoras y sencillas a los clientes. Entre ellos, un servicio pionero que permite darse de alta como clientes en cinco pasos, en un proceso 100% digital, o la Cuenta 1I2I3 Profesional, con préstamos específicos en condiciones preferentes y un nuevo modelo de relación con 800 gestores especializados.
También el pasado mes de enero puso en marcha el Fondo Smart, dotado con 620 millones, el mayor fondo de deuda privada en España destinado a empresas que facturan hasta 100 millones. Según destaca el propio banco, “se trata de una nueva vía de financiación estratégica para proyectos con criterios de crecimiento, sostenibilidad, innovación, digitalización y generación de empleo. Su objetivo principal es acompañar los buenos proyectos a lo largo de su ciclo de crecimiento”. Además, las empresas pueden acceder a los préstamos en condiciones especiales diseñados por Banco Santander con fondos del Banco Europeo de Inversiones (BEI), entre ellos la línea BEI-Santander para promover inversiones sostenibles que contribuyan a la acción por el clima.
Servicios digitales
Proyectos como la plataforma digital We.Trade, que utiliza la denominada tecnología blockchain para simplificar las operaciones internacionales de las empresas permitiendo, de forma fácil y segura, cerrar pedidos, establecer las condiciones de las operaciones y acceder a otros servicios financieros internacionales con total seguridad y confianza; o la herramienta Santander Trade, enfocada principalmente a la comercialización de productos en el exterior, demuestran cómo el Santander se ha volcado con las empresas en su trasformación digital.
Y es la propia Ana Botín, presidenta del gigante financiero, la gran impulsora de la revolución tecnológica que vive el banco. “Estamos invirtiendo en plataformas globales de negocio que permiten aprovechar sinergias, ofrecer mejores productos y servicios y ser maÌÂÂs rentables, en favor de nuestros clientes particulares, pymes y empresas en todos nuestros mercados”, señaló en la última junta de accionistas.
Ana Botín, durante la Junta general extraordinaria de accionistas, celebrada el pasado mes de julio.
Formación, apoyo al empleo, cursos de gestión empresarial, intercambio de mejores prácticas, tutoriales online sobre la transformación digital o sobre los nuevos paradigmas (e-commerce, omnicanalidad, big data o economía colaborativa), talleres, seminarios, subvenciones y ayudas… Así se completa el proyecto global del grupo Santander para facilitar el acceso de las pymes y autónomos no sólo a los servicios financieros y al crédito, sino también a las nuevas tecnologías, a la formación cualificada y a sus proyectos de expansión en nuevos mercados.
Un esfuerzo que ha obtenido recientemente el reconocimiento de la prestigiosa revista especializada Euromoney, que en la última edición de sus premios anuales -otorgados el pasado mes de julio- ha nombrado al Santander “Mejor banco para pymes de Europa Occidental”. Euromoney reconocía así por tercera vez el apoyo que el banco ofrece a las pequeñas y medianas empresas para superar obstáculos en su crecimiento.