Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), el conjunto de transacciones en el resto de España han crecido este año un 14,6% respecto al pasado año, pero a pesar de ello, los precios del mercado no acaban de despegar, ya que han aumentado solo en un 1,6% respecto al año anterior. La tasadora Tinsa ha publicado que
el precio de la vivienda seguirá subiendo, pero en menor medida que en 2016. Concretamente, prevé que el avance  para el próximo año sea del 1% o 2%.

La tasadora también ha  afirmado que uno de los factores que está taponando el avance inmobiliario es la precariedad en el empleo, ya que está frenando los precios de los pisos. Asegura que esta senda continuará el próximo año, con subidas similares, entre el 0% y el 2%.

Jorge Ripoll, responsable del área de análisis de la tasadora ha afirmado que los precios no están subiendo porque a pesar de que la creación de empleo haya aumentado, este es más precario y con salarios más bajos. De esta forma los ciudadanos cuentan con menos dinero para pagar los pisos.

La subida de los precios de Madrid y Barcelona, son consecuencia de que los compradores e inversores principales son extranjeros. Ripoll ha añadido que los centros urbanos viven un proceso de penetración, que está atrayendo a los compradores con un alto poder adquisitivo.

Tras cerrar el pasado año con un volumen de inversión que alcanzaba los 12.884 millones de euros, los analistas prevén que este 2016 cerrará con 13.900 millones de euros. Según Adolfo Ramírez Escudero, presidente de CBRE, en declaraciones a Expansión, “posiblemente estemos en récord de inversión a final de año, con nuevos propietarios de inmuebles, ya capitalizados y con un perfil más institucional, como fondos de inversión alemanes y aseguradoras”.