En un comunicado reciente, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha anunciado que ha revisado al alza su previsión de crecimiento para la economía mundial en 2023. Se espera que el Producto Interno Bruto (PIB) global crezca un 3%, manteniendo el mismo ritmo de expansión en 2024. Esta revisión al alza indica una recuperación gradual de la actividad económica a nivel global después de los impactos negativos de la pandemia y otros eventos como la invasión de Ucrania.

Aunque el pronóstico para 2023 es ligeramente superior al previsto en abril, el FMI advierte que la economía mundial aún no está fuera de peligro. Según Pierre Olivier Gourinchas, economista jefe del FMI, "la economía mundial va por buen camino, pero aún no está fuera de peligro". A corto plazo, se observan señales de progreso, como la disipación de las inquietudes inmediatas sobre el sector bancario, pero las altas tasas de interés están afectando gradualmente al sistema financiero, lo que sigue siendo una preocupación para la estabilidad económica.

En su análisis, el FMI destaca que las economías avanzadas experimentarán una desaceleración significativa en su crecimiento en 2023, pasando del 2,7% en 2022 al 1,5% este año, dos décimas más de lo anticipado anteriormente. Se espera que esta tendencia se mantenga en 2024, con una expansión del 1,4%. En el caso de Estados Unidos, se proyecta un crecimiento del 1,8% en 2023, seguido de una desaceleración al 1% en 2024. Para la eurozona, se espera un crecimiento del 0,9% en 2023, que se acelerará al 1,5% en 2024. En el Reino Unido, se espera una desaceleración al 0,4% en 2023 y un repunte al 1% el próximo año.

En cuanto a las economías emergentes y en desarrollo, el FMI proyecta un crecimiento del 4% en 2023 y del 4,1% en 2024. Sin embargo, existen divergencias significativas dentro de este grupo de economías. Para China, se mantiene la previsión de un crecimiento del 5,2% en 2023 y del 4,5% en 2024. Por otro lado, se espera que la India experimente un crecimiento del 6,1% este año, una revisión al alza de dos décimas, y un crecimiento del 6,3% en 2024. En el caso de Rusia, el FMI ha revisado al alza su pronóstico de crecimiento para este año, pasando al 1,5%, y ha mantenido sin cambios su pronóstico para 2024, en el 1,3%.

Sin embargo, el FMI también advierte sobre la persistencia de la inflación y recomienda mantener una política monetaria restrictiva para combatirla. Según las nuevas previsiones, se espera que la inflación general mundial disminuya gradualmente, pero se mantendrá por encima del promedio pre-pandemia. Se proyecta que la inflación general disminuirá al 6,8% en 2023 y al 5,2% en 2024. A nivel mundial, se espera que la inflación subyacente disminuya más lentamente, pasando de un promedio anual del 6,5% en 2022 al 6% en 2023 y al 4,7% en 2024.

En resumen, el FMI ha revisado al alza su previsión de crecimiento económico mundial para 2023, lo que indica una recuperación gradual después de los impactos negativos de la pandemia. Sin embargo, la inflación sigue siendo una preocupación y se recomienda mantener una política monetaria restrictiva para garantizar la estabilidad financiera. Aunque la economía mundial va por buen camino, aún existen riesgos y desafíos que deben abordarse para lograr una recuperación sostenible.