Aunque abría con signo dispar, el mercado americano cotiza a la media hora de negocio en positivo tras conocerse los datos macroeconómicos de la jornada. Por una parte, el gasto en construcción –que cayó un 0,4% en julio- y por otro el índice ISM manufacturero que cayó en agosto hasta los 52,9 puntos desde los 53,8 puntos. El mercado esperaba una lectura del indicador de 53 enteros. “La sesión se presenta sin cambios importantes, es decir, es probable que haya poca volatilidad, que no haya atisbos de grandes volatilidades después de que, tanto Merrill Lynch como Lehman Brothers vean riesgos a medio plazo de recesión económica en Estados Unidos”, comenta Diego Escribano, director de gestión de Fortis Banca Privada. Esta semana se conocerá también el informe de empleo de agosto, el dato ISM del sector servicios, las ventas de viviendas pendientes en julio y el Libro Beige de la Reserva Federal. Los inversores también permanecerán atentos al sector ya que se publicarán las cifras de venta de agosto de los fabricantes de coches. Por el momento, General Motors cotiza con una subida del 0,72%, Ford plano opera en los 7,81 dólares mientras que DaimlerChrysler repunta un 0,70%. Merck también centra la atención de los inversores –cae un 0,42%- después de que un informe publicado el fin de semana indicase que su compuesto contra el colesterol Cordaptive podría disminuir el colesterol sin efectos secundarios. En el lado de los avances, se colocan las acciones de Intel que suben un 0,97% después de que Bank of America haya incrementado el precio objetivo de esta compañía ante un posible aumento de la demanda de ordenadores. Mientras, Microsoft sube un 0,24% después de que Bear Sterns señalase que Yahoo (4,93%) podría ser objetivo del gigante informático.