Además, las acciones de Vueling se ven impulsadas por los últimos datos de ocupación publicados, que reflejan como las compañías de bajo coste ganan cuota de mercado a las tradicionales. Otro factor que da alas en bolsa a Vueling es el bajo coste del petróleo, que beneficia más a este tipo de compañías cuyos márgenes están más ajustados que los de las aerolíneas de bandera.
La Unión Europea tiene hasta este viernes para declararse competente sobre la fusión, aunque las autoridades españolas han pedido pronunciarse al respecto. A mediados de noviembre, Iberia notificó a Bruselas su intención de hacerse con el control de las compañías españolas de bajo coste Vueling y Clickair mediante el intercambio y adquisición de acciones. En julio, los consejos de administración de Vueling y Clickair aprobaron el contrato marco de fusión de ambas compañías, que prevé la creación de una nueva aerolínea con sede en Barcelona y con Iberia como socio industrial de referencia.
La compañía fusionada operará bajo el nombre de Vueling y se convertirá en la mayor aerolínea de bajo coste de España, con 45 aviones, 2.020 empleados, 300 vuelos al día y 112 rutas

