Este consejo constituirá así el primer paso para la fusión de las dos empresas y la construcción de un nuevo grupo inmobiliario cotizado, que controlará la familia Santamaría, actual titular de Reyal.En concreto, esta familia prevé mantener entre un 55% y un 60% de la compañía resultante, en el que se prevé que otros socios tengan un máximo del 15%. El resto cotizará en el mercado.