El presidente de Unión Fenosa, Pedro José Lopéz Jiménez comenta la andadura de la empresa que regenta en su proceso de salir al exterior. En boca de todos: la regulación del déficit tarifario. Admite que el déficit estipulado actualmente está provocado por un sistema de tarifas irreales. Ratifica sus palabras cuando asegura que “un déficit del 20% del volumen económico mundial es una salvajada, una burbuja”. Y como toda pompa “salpicará y puede dañar a las empresas del sector”. La solución de Jiménez pasa por eliminar las tarifas y “cerrar el agujero entre el precio y el consumo”. Durante las jornadas sobre la internacionalización de la empresa española que se celebran en la Universidad Menéndez y Pelayo de Santander consideró de especial importancia la financiación del déficit tarifario gestionado por la CNE pues “la respuesta de los mercados financieros es un juicio de la credibilidad de la economía española”. A la espera de ver cual será la solución, el presidente de la tercera eléctrica española anuncia que duplicará sus resultados.
“Yo soy ACS”Y a la espera también se mantendrá en cuanto a operaciones corporativas se refiere. Recuerda que en los tres años que lleva al frente de la compañía “siempre ha habido bastantes especulaciones sobre la reordenación del mapa eléctrico y su composición”.En su intervención recurre al famoso monólogo del humorista Miguel Gila que recita: mañana puede llover o no llover, esperaremos a mañana a ver que pasa. Y con esa tranquilidad y “mientras se deshoja la margarita” afirma “yo soy ACS”. Con esta declaración, Fenosa estaría dando su apoyo a una posible alianza con la constructora que preside Florentino Pérez en una reestructuración en la que también entrarían en juego Iberdrola y Gas Natural. Y admite que la posibilidad de ser “cazador y presa sirve de estímulo para seguir creciendo”Llegados al tema de la jornada admite que “la contracción de la economía va a provocar cambios en la salida al exterior de las compañías” y que serán las que ya estén fuera las que lo tengan más fácil para ampliar su presencia. Con negocios en Colombia, México y Egipto, el presidente de la eléctrica confirma que quiere entrar en Estados Unidos pues “la mitad del negocio en los resultados vienen de fuera y permitirá que la eléctrica “alcance entre el 90-95% del objetivo de duplicar su resultado”. Su turbulenta historia con Nicaragua, con la que mantiene un litigio tras las amenazas de expropiación de la filial de la eléctrica que administra la distribución y comercialización de energía del país, ha llegado a la situación de “no volver a mandar un euro”.

