El presidente del BCE destacó que desde comienzos de octubre del pasado año la entidad ha bajado los tipos de interés en 2,25 puntos porcentuales y que es necesario esperar para ver cómo se transmiten los mecanismos de la política monetaria. No obstante, el Consejo de Gobierno esperará a tener nuevos datos económicos y las nuevas proyecciones económicas de los economistas del BCE para tomar su próxima decisión de política monetaria por lo que Trichet enfatizó que la entidad no está predeterminada.
A su vez, Trichet afirmó que "las expectativas de inflación están ancladas en línea con nuestra definición de estabilidad de precios", que es una tasa de inflación cercana pero siempre por debajo del 2 por ciento.
El Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) bajó el pasado enero cinco décimas hasta el 1,1 por ciento, respecto a diciembre de 2008, debido a la caída de los precios de las materias primas, recordó Trichet
Asimismo, el banquero galo advirtió de que cualquier medida de carácter proteccionista representa una "amenaza muy importante" y apuntó que los gobiernos del bloque del euro cometerían un "gran error".
Por otra parte, Trichet afirmó que la actual crisis supone en parte el "precio a pagar por los desequilibrios acumulados" por el sistema, y advirtió a las autoridades y bancos centrales de que deben permanecer alerta, puesto que debido al alto grado de incertidumbre "hay que estar preparado para cualquier cosa".
Además, el máximo responsable de política monetaria de la zona euro señaló que las autoridades deben profundizar en su labor para convencer al sector privado, del que opinó que depende en gran medida la recuperación de la confianza y de la actividad, de que igual que suponía un riesgo el exceso de confianza, también representa un riesgo para la economía el exceso de pesimismo.

