La agencia de calificación crediticia Standard & Poors (S&P) asegura que en el caso de que EEUU incumpliera el servicio de su deuda rebajará su nota de solvencia hasta el nivel D, o de insolvencia, desde la máxima nota actual AAA, aunque confía en que los legisladores estadounidenses alcancen un pacto para elevar el techo de deuda que permita afrontar al Gobierno estadounidense sus obligaciones.

Si cualquier Gobierno no paga sus deudas a tiempo, el rating de ese Gobierno pasa a la categoría D, explicó en una entrevista concedida a BloombergTV el presidente del comité de ratings soberanos de S&P, John Chambers, quien, sin embargo, mostró su confianza en que el Gobierno estadounidense eleve el techo de deuda.