En concreto, los analistas de Barclays han elevado el precio objetivo de Repsol desde 13 a 14,50 euros, lo que supone un potencial de revalorización de más de casi un 19% respecto al cierre de ayer martes.
Más optimistas son incluso los expertos de Jefferies International, que elevan su consejo sobre las acciones de la petrolera de ‘mantener’ a ‘comprar’. El precio objetivo pasa de 12,3 a 15 euros, un 23% por encima del cierre del martes.
Repsol acumula en lo que va de 2022 una revalorización de más de un 20% que ha dejado su capitalización bursátil en el entorno de los 19.200 millones de euros. Buena parte de la culpa de este rally lo tiene la subida vertiginosa que ha tenido el precio del petróleo desde que comenzó la invasión rusa de Ucrania. Hoy el petróleo Brent de referencia en Europa se paga a 108,04 dólares el barril, una subida del 0,59%. El crudo estadounidense alcanza los 103,20 dólares.
Repsol aumenta su apuesta en la eólica marina
Pero la compañía del Ibex 35 no se limita al mercado del petróleo. La compañía ha entrado con fuerza también en el mercado de la eólica marina gracias a la alianza que acaba de firmar con Orsted.
De acuerdo con los términos del acuerdo, tanto Repsol como Orsted desarrollarán conjuntamente su primer parque de eólica marina flotante con una capacidad de entre 500 y 1.000 Megavatios, que podría estar en operación en el año 2030 si se cumplen los plazos previstos. Las dos compañías se preparan además para la subasta de 3.000 MW de energía eólica marina que se subastará este año por el gobierno.
Repsol ya cuenta con una participación en eólica marina flotante con el proyecto WindFloat Atlantic en la costa de Portugal. La tecnología eólica marina flotante permite que el offshore no se limite geográficamente y ahora se comienza a comercializar. La intención de la compañía es potenciar esta nueva tecnología que le permitirá avanzar en la consecución de sus objetivos de capacidad instalada y de descarbonización en el año 2030.
