Sin embargo, un indicador de los inicios en el futuro descendió a su nivel más bajo en 14 años. Pese a las cifras, el dólar permanecía bajo presión y el euro proseguía su marcha ascendente, lo que sugiere que los inversionistas aún creen que la Reserva Federal se verá obligada a recortar las tasas de interés en diciembre. Tras la publicación del informe mensual, el euro alcanzó un máximo de US$1,4806. Las renovadas bajas del dólar comenzaron durante la noche, debido a las preocupaciones de que los países del Golfo Pérsico -varios de los cuales fijan el valor de sus monedas al dólar- podrían evaluar la situación del tipo de cambio para contrarrestar la debilidad de la moneda estadounidense. A esto se sumaron las alzas en los mercados accionarios de Europa y Asia, pese a las pronunciadas caídas de los índices bursátiles en Estados Unidos. Un alza en las acciones extranjeras, pese a los descensos en Estados Unidos, sugiere que los problemas económicos estadounidenses podrían permanecer contenidos, sin propagarse a nivel mundial. Durante la mañana en Nueva York, el euro se negociaba en US$1,4791 frente a US$1,4665 del lunes por la tarde, mientras que el dólar cambiaba de manos a Y110,02 en relación con los Y109,80. El euro se cotizaba en Y162,77 frente a los Y161,15. La libra esterlina, por su parte, se ubicaba en US$2,0640 en comparación con los US$2,0492 de la víspera, según EBS. En relación con el franco suizo, el dólar se negociaba en CHF1,1092 frente a CHF1,1154.