Merkel criticó anoche las jubilaciones anticipadas y los periodos vacacionales en algunos países en un acto de la Unión Cristianodemócrata (CDU), que preside, en la localidad de Meschede, en el occidental estado de Renania del Norte-Westfalia.

No se trata sólo de no endeudarse más, "sino de que en países como Grecia, España, Portugal no se puedan producir jubilaciones antes que en Alemania" y "de que todos se esfuercen un poco de igual manera, esto es importante".

"No podemos tener una divisa (común) y que unos tengan muchas vacaciones y otros muy pocas. A la larga esto no funciona", dijo Merkel.

Alemania está prolongando la edad de jubilación paulatinamente de 65 a 67 años y la legislación establece en este país unas vacaciones anuales mínimas para los trabajadores de 20 días laborables al año.

Merkel reiteró la solidaridad de Alemania con Grecia a la hora de que el país heleno supere su crisis de deuda y presupuestaria, aunque ligada a duras negociaciones.