La filial de banca privada de Santander decidió en noviembre ofrecer a los clientes que invirtieron en el Seguro Banif Estructurado -garantizado por Lehman- un canje por bonos de Abbey, estandarte del grupo en el Reino Unido, para evitar las pérdidas ocasionadas por la quiebra de la entidad estadounidense.
El banco señaló entonces su interés en mantener la confianza de los clientes a largo plazo y sostuvo que la propuesta suponía un apoyo "muy significativo" a sus clientes, sin que supusiera ningún reconocimiento de comercialización defectuosa.

