La fuerte caída registrada en enero está vinculada al descenso en los pedidos relacionados con la industria del transporte, que bajaron un 13,4% tras tres meses consecutivos al alza, y sin los cuales el indicador hubiera bajado sólo un 1,6%. Por su parte, sin tener en cuenta los pedidos realizados por la industria de defensa, las ordenes hubieran caído un 4,7%.El consenso del mercado había pronosticado una caída del 5% como indicio de la ralentización de la economía estadounidense, que algunos analistas prevén que no registre crecimiento alguno en los datos del PIB que serán publicados la semana que viene.