En gran parte debido a la mejora de las condiciones productivas y de servicios no financieros y minoristas.  
La actividad del sector inmobiliario y construcción de nueva vivienda se mantienen en niveles bajos. Se siguen incrementando el número de ofertas de viviendas que no encuentran demanda.


El deficit federal se redujo desde $91,410 millones en diciembre de 2009, hasta $79,990 millones en diciembre de 2010. El gasto federal en diciembre fue de $316,800 millones, y los ingresos ascendieron a $236,800 millones, un 8% más que el año pasado debido al incremento de impuestos sobre las rentas personales y corporativas.