Para el período comprendido entre 2010 y 2012, el EIU calcula una tasa de crecimiento anual del 3,9%. Si se tienen en cuenta sólo los cuatro países miembros del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) y Venezuela, miembro asociado de la institución, el crecimiento, que fue del 5,2% en 2006 y se espera que alcance el 5,7% en 2007, bajará en 2008 al 4,8% y en 2009, al 4,2%.El impacto de la ralentización económica en Estados Unidos (con unas tasas de crecimiento del 2,9% en 2006; del 2,1% en 2007, y del 1,5% en 2008) será mayor en los países con lazos comerciales más estrechos con Estados Unidos, como es el caso de México.Sin embargo, a pesar de que la crisis de la "subprime" (hipotecas basura) ha tensado las condiciones financieras internacionales, el EIU asegura que el impacto crediticio en la mayoría de países de Latinoamérica es "probable" que permanezca "moderado".Asimismo, considera que muchos países de la zona han desarrollado políticas que han mejorado su solvencia.De este modo, la mayoría de países latinoamericanos
operan con tasas de cambio flexibles y se han protegido con reservas de moneda extranjera.La unidad de análisis de The Economist
destaca que estas economías han reducido su déficit fiscal y su deuda externa.Por todo ello, el EIU no prevé que ninguna de las grandes economías de la región encuentren dificultades de financiación, aunque indica que el riesgo de una crisis financiera es todavía real, especialmente si las condiciones mundiales de financiación se deterioran en el futuro.La región sigue dependiendo en un alto grado de la demanda externa y "sufriría" como consecuencia de una caída pronunciada en Estados Unidos o China.La media de crecimiento anual de Brasil hasta 2012 se sitúa por encima del 4%, mayor que la media del 3% del período entre 2003 y 2007, aunque por debajo de las tasas de crecimiento de otras economías emergentes, especialmente las de Asia, como la India, que crecerá anualmente por encima del 5%.La previsión para México es del 3% en 2007 (4,8% en 2006), del 2,8% en 2008 y del 3,5% en 2009, como resultado de la normalización del consumo privado.El crecimiento de México se verá afectado por la situación económica en Estados Unidos, destino del 84% de sus exportaciones de bienes.Para Argentina, el EIU pronostica un período de "boyante expansión económica" estimulado por un "generoso" gasto público.El crecimiento de este país, en el que se mantendrá el intervencionismo económico estatal, especialmente en las infraestructuras y la energía, se verá reducido por los "cuellos de botella" (sobre todo en el sector energético), la escasez de financiación y las políticas de contención de la inflación.El elevado precio del petróleo, y las previsiones de que éste se mantenga en valores similares durante un tiempo prolongado, llevan al EIU a prever que el círculo económico alcista de Venezuela será más alargado que en anteriores ocasiones.Sin embargo, el fin de los estímulos fiscales para la inversión extranjera y los movimientos hacia la nacionalización de sectores estratégicos empezarán a dificultar el crecimiento del país.