La retribución de los tres primeros meses de 2009 supuso una cifra récord, ya que duplicó la del mismo periodo de 2008 y se vio impulsada por los 6.243 millones de euros que desembolsó Endesa como dividendo extraordinario.

Entre las razones que también explican la fuerte caída en relación al ejercicio anterior es que muchas compañías adelantaron a diciembre los dividendos que tradicionalmente pagaban en enero por motivos fiscales, llegando a distribuir en conjunto más de 3.000 millones de euros.


A pesar del descenso interanual, las compañías lograron repartir casi 3.000 millones de euros durante los tres primeros meses del año, con lo que de continuar así, 2010 también podría dejar importantes beneficios para los accionistas, tras percibir 32.298 millones durante 2009. La retribución al accionista durante 2009 se incrementó un 15% a pesar de la crisis.