El presidente del grupo, Bruno Lafont, explicó en una conferencia telefónica posterior a la publicación de los resultados que todas estas medidas tienen como objetivo reducir la deuda que en 2008 alcanzó los 16.884 millones de euros.
Buscan además reforzar la estructura financiera de la compañía para superar la crisis actual.
Lafont admitió que este plan de acción tendrá consecuencias sobre el empleo, aunque no precisó detalles.
El grupo tuvo en 2008 un beneficio neto de 1.598 millones de euros, muy inferior al del año anterior, mientras que su facturación aumentó un 8%, hasta los 19.033 millones de euros.
Cuentas del cuarto trimestre
En el cuarto trimestre del año pasado, su beneficio cayó hasta los 40 millones de euros, frente a los 375 millones correspondientes al mismo periodo del año anterior.
"En un contexto financiero y económico sin precedentes, nuestro objetivo es reducir rápidamente nuestra deuda en 2009", explicó el presidente de Lafarge en un comunicado.
El grupo considera que los planes de impulso económico lanzados por los distintos gobiernos europeos "deberían tener un impacto significativo en nuestros mercados en 2010, probablemente más limitado en 2009".

