Según la mayoría de los expertos, este nuevo recorte era necesario a la luz del estado de la economía, aquejada por las turbulencias en el mercado inmobiliario y financiero y con unos niveles de inflación que no se han dado en casi dos décadas. "La Fed tendrá que mantener los tipos en un nivel bajo, probablemente por debajo de la inflación", afirmaba antes de la decisión Robert Shiller, economista en la Universidad de Yale.EEUU cerró 2007 con una inflación del 4,1%, la mayor en 17 años, lo que aumentó la alarma sobre una posible recesión.Los salarios de los trabajadores, ajustados por la inflación, bajaron un 0,9% en 2007, lo que supone la mayor pérdida de poder adquisitivo desde 2005.En su reunión de dos días, el Comité del Mercado Abierto de la Fed también revisó sus perspectivas económicas, que animarán o decepcionarán a los mercados y serán un buen indicador de si la economía estadounidense podrá esquivar una recesión.En este contexto, el Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó hoy a la baja su previsión de crecimiento de EEUU para el 2008, hasta dejarlo en el 1,5%.El organismo constató que los problemas en el sector inmobiliario se han extendido al resto de la economía, donde las manufacturas, el empleo y el consumo han perdido dinamismo.No obstante, el economista jefe del FMI, Simon Johnson, prevé que la inflación se moderará en 2008, lo que, a pesar de la debilidad económica, dejaría espacio a la Fed para bajar los tipos.El foco de la Fed está en controlar la inflación y favorecer una política monetaria que impulse el crecimiento económico.A pesar de la acción de la institución, los mercados se muestran escépticos con el futuro de la economía estadounidense y algunos analistas creen que se necesitará un empujón más firme de parte del Gobierno para evitar una recesión.