La Comisión Europea presentará hoy sus propuestas de presupuesto de la UE para 2014-2020 entre presiones de los grandes países -especialmente Reino Unido, Alemania y Francia- para congelar el gasto, en línea con las medidas de ajuste que han adoptado la mayoría de Estados miembros para hacer frente a la crisis.

La principal novedad que sopesa Bruselas es introducir un impuesto europeo
para financiar las arcas comunitarias y reducir así las contribuciones nacionales. La opción con más posibilidades, según se ha filtrado a la prensa europea, es una tasa al sector financiero.

Para España, la propuesta es importante porque a partir de 2014 se convertirá por primera vez en contribuyente neta al presupuesto de la UE tras haber sido la principal beneficiaria de las ayudas comunitarias. Sólo Extremadura mantendrá las ayudas destinadas a las regiones más pobres, mientras que Galicia, Andalucía y Castilla-La Mancha perderán la mayor parte de los fondos que reciben en la actualidad porque su nivel de renta supera el 75% de la media europea.

El presupuesto de la UE asciende a 926.000 millones de euros, el 1% del PIB de la UE. El 40% del gasto se destina a la política agrícola común, mientras que el 36% lo absorben las ayudas regionales.

Los principales perjudicados de estas propuestas serían los países del este -liderados por Polonia, que asume la presidencia de turno de la UE el 1 de julio-, que iban a ser los mayores beneficiaros de las ayudas europeas durante el próximo periodo.


Fuente: Europa Press