Hace ya tiempo desde que Iberdrola la adquiriese y por unas razones u otras, al final la división británica no termina de despegar. "Los problemas regulatorios, el propio comportamiento del mercado británico, la crisis económica que ha afectado no solamente a los precios, sino también al consumo, y el comportamiento de la divisa son algunos de los factores que han afectado a Scottish Power, y nos cuesta recordar una presentación de resultados en la que la filial británica haya tenido un buen comportamiento", admite Inverseguros en su informe.
 

Más allá de esta división que la compañía debe mejorar, pensamos que Iberdrola continúa haciendo los deberes en un entorno difícil. Cuando mejoren las condiciones del sector, su acción, en niveles atractivos, debería reflejarlo. Recomendación: MANTENER.