La operación se llevará cabo mediante la constitución de una nueva sociedad en la que estarán los accionistas de ambas aerolíneas, que mantendrán sus marcas y cotizará tanto en la Bolsa de Madrid como en la de Londres. El proceso va a ser, según Conte, "totalmente diferente al que llevaron a cabo en el 2004 Air France y KLM", porque aquel consistió en una ampliación de capital de la aerolínea francesa para comprar las acciones de la holandesa, mientras que en este caso "se va a crear una sociedad con el accionariado de ambas líneas aéreas".La participación de cada una en el accionariado de la nueva sociedad es algo que "aún está por analizar, ya que no se sabe cual es la ecuación que se va a aplicar en el canje de acciones". Lo que sí está claro es que la capitalización bursátil de British Airways es superior a la de Iberia, aunque ambos directivos prevén que seguirá siendo un accionista de referencia Caja Madrid, que posee el 23,42% del capital de la empresa española. Confiamos, dijo Walsh, en que
Caja Madrid siga con nosotros, porque su participación es "muy importante", tanto para Iberia como para British.Aunque no se puede dar un calendario de consolidación de la operación, lo que sí anticiparon Conte y Walsh es que al mantenerse las dos marcas van a existir tres consejos de administración diferentes, uno por cada sociedad, más el que se cree con la nueva empresa. Cada marca va a mantener su propio Gobierno Corporativo, dijo Conte, porque "el día a día de las empresas va a ser como el de ahora", y luego habrá que diseñar cómo va a ser el Consejo de la empresa conjunta.La nueva compañía será la tercera aerolínea del mundo, con una flota de más de 450 aviones y más de 200 destinos en cien países
, cubriendo desde BA, Africa, Asia y América del Norte, y desde Iberia, todo el área Latinoamericana.Para el consejero delegado de BA, "somos dos empresas complementarias en nuestras redes y eso nos da un plus atractivo de desarrollo en un contexto económico como es el actual", y además "vamos a poder actuar desde dos hubs tan importantes como son Heathrow y Madrid, con una presencia global imbatible".La operación es diferente a la planteada hace 18 meses cuando se habló de la posibilidad de que BA y el fondo TPG formularan una oferta de compra por Iberia, porque ahora "estamos hablando de una fusión, no de una venta o compra", subrayó Conte. Esto no es una "actuación por supervivencia", porque, según Walsh, somos dos compañías fuertes. Se trata de "crear una empresa mucho más fuerte que nos de sinergias en muchos campos y que nos permita ahorrar costes en diferentes operaciones", y puso como ejemplo la compra de aviones.Las relaciones con American Airlines, compañía estadounidense con la que ambas están negociando para llegar a acuerdos puntuales, "no se van a ver afectadas por esta fusión", sino que "seguirán adelante e incluso pueden mejorar en el futuro", dijo Conte. Por último, ambos directivos manifestaron su alegría por haber llegado a esta decisión, y afirmaron que "nos encontramos ante un día histórico para la aviación mundial".