Según los analistas, la nueva posición de la caja madrileña -que se sitúa como primer accionista- reduce la posibilidad de una lucha accionarial por hacerse con el control de la aerolínea. En otras palabras, se reducen las posibilidades de una lucha de OPAs. Según ha explicado a ESTRATEGIAS DE INVERSIÓN Javier Barrio, responsable de ventas institucionales de BPI, la celebración del consejo de Iberia y la decisión que tome “es un asunto bastante complicado” porque “más importante de esto es el posicionamiento de Caja Madrid”. El experto de BPI considera que el comportamiento de la entidad bancaria “afecta negativamente a la cotización de la aerolínea” pues “elimina pretensiones de OPA sobre la aerolínea”.En cualquier caso, y a la espera de ver los resultados de la reunión, la caída de la acción en bolsa “refleja que la entrada de la caja de ahorros en Iberia y la formación del bloque accionarial sin intención de vender, dificulta el proceso de compra sobre la compañía”.