Se espera que esté en servicio en 2012 y con esta embarcación, la compañía busca atender la demanda de maquinaria especial para abordar este tipo de instalaciones de energías renovables que considera surgirá en los próximos años.

Hochtief indicó en un comunicado que espera alcanzar una facturación anual de unos 500 millones de euros
con todo su negocio de instalaciones 'Offshore'.


Mientras, el frente con ACS sigue abierto y los accionistas alemanes, en boca de su representante Jella Benner-Heinacher, admiten que "quieren un socio fiable y, con respecto a ACS no hay buenos antecedentes en cuanto a OPAs, pues en Dragados entró como socio amistoso y, de repente, terminó por una OPA hostil".