La ministra de Economía, Christine Lagarde, adelantó la pasada semana que los datos del cuarto trimestre serán negativos a causa de la fuerte caída de la producción industrial.

Precisó que el Ejecutivo aguarda a conocer los datos definitivos de 2008 para revisar sus previsiones de crecimiento para este año, que en la actualidad sitúa en un saldo positivo de entre el 0,2 y el 0,5%.


El Banco de Francia señaló, por otro lado, que el clima de negocios en el país se deterioró en enero pasado, lo que lo mantiene a niveles "muy bajos".

Las previsiones para los próximos meses se orientan a la baja en todos los sectores excepto en los bienes de consumo y la industria alimentaria, según el Banco de Francia.