"La perspectiva negativa refleja la decreciente confianza en que se aprueben las medidas fiscales necesarias para situar a las finanzas públicas de EEUU en una senda sostenible", indicó Fitch en un comunicado, en el que asegura que las posibilidades de una rebaja en los próximos dos años son del 50%.

La decisión de mantener la calificación de EE.UU. refleja que los fundamentos económicos y crediticios del país son "todavía fuertes", según la agencia, que añadió que las obligaciones soberanas, tanto el dólar como los valores del Departamento del Tesoro, siguen siendo la principal referencia de la economía mundial.

La semana pasada republicanos y demócratas agotaron el plazo para llegar a un acuerdo sobre el techo de deuda.