En la que será la última subasta de deuda española del verano –tras suspender las programadas para el resto del mes de agosto- el Tesoro ha colocado 3.130 millones en papel con vencimiento a 2, 4 y 10 años. Sin embargo, el organismo ha tenido que ofrecer mayor rentabilidad para convencer a los acreedores. Todo esto en un contexto de bajada de la prima de riesgo – 527 pb- a la espera de que hoy el BCE anuncie medidas que puedan relajar las condiciones de financiación de España e Italia.

En concreto, el Tesoro ha colocado 1.062 millones en bonos a 2 años a un interés del 4,77%, frente al 3,59% de la anterior subasta de estas notas. El ratio de cobertura se ha situado en 3 veces, versus las 3,04 veces de marzo.

El interés ofrecido a los acreedores del papel con vencimiento a 4 años ha subido al 5,971% (5,436% anterior), y el ratio de cobertura se situó en2 ,7 veces (2,46x de abril). Con este vencimiento ha logrado vender 1.024 millones.

En el papel de más largo plazo, a 10 años, el Tesoro ha ofrecido un interés del 6,647% (6,43% anterior ) y el ratio de cobertura se ha situado de 2,4 veces, respecto al 3,18x de la subasta de julio. En este tramo ha logrado colocar 1.046 millones de euros.

Tras la subasta la prima de riesgo ha descendido a 527 puntos básicos y la rentabilidad del bono a 10 años se ha situado en el 6,65%.

Mientras, el Ibex 35 suavizó sus caídas y se volvió a situar por encima de los 6.700 puntos. En el mercado de divisas, el euro se acercó a los 1,228

El Tesoro ha cubierto ya el 68,6% de las emisiones de deuda a medio y largo plazo previstas, lo que permite mantener la estrategia de prudencia seguida hasta ahora.